El naval genera hoy menos de la mitad del empleo auxiliar que hace un lustro

Beatriz García Couce
Beatriz Couce FERROL

FERROL CIUDAD

Navantia fabrica dos buques en Ferrol y componentes de eólica marina, en la foto, en Fene.
Navantia fabrica dos buques en Ferrol y componentes de eólica marina, en la foto, en Fene. josé pardo< / span>

Unos 700 operarios participan en la construcción del flotel y del BAM en la ría

07 abr 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

Después de los años negros de ausencia de contratos en los astilleros de la ría, la rueda de la actividad comenzó a moverse en las antiguas Astano y Bazán conforme iban entrando nuevos pedidos. Sin embargo, a punto de entregarse el buque flotel para la petrolera mexicana Pemex y cuando restan algunas semanas para la puesta de quilla del Buque de Acción Marítima (BAM), la industria de fabricación de barcos en la ría ferrolana únicamente emplea a 700 trabajadores de compañías auxiliares, según fuentes sindicales. A esta cifra hay que sumarle otros 400 empleos de operarios de subcontratas que atienden las obras de la división de Reparaciones, y también el medio centenar que se encuentran en el astillero de Fene desarrollando distintos trabajos para la construcción de componentes de eólica marina. En concreto, se trata de las tareas del contrato de Iberdrola -para la fabricación de 29 jackets- y del de Statoil para la ejecución de cinco superestructuras para el primer parque eólico marino flotante del mundo.

Menos de 2.000

En conjunto, suman unos 1.600 trabajadores auxiliares, menos de la mitad de los que tenían ocupación en las plantas de Ferrol y Fene hace un lustro, cuando aún contaban con pedidos para la fabricación de buques.

En estos momentos, ha descendido considerablemente la actividad en el gremio de aceros en el flotel, aunque repunta la de habilitación y dotación de todos los servicios, habitual en la última fase de fabricación de un buque mediante el sistema de construcción integrada que utiliza Navantia. El programa del BAM sin embargo, por el momento se encuentra centrado en su primera fase, en la fabricación de los bloques.

Las cifras evidencian que las obras en curso, que han sacado de la parálisis a las plantas locales, aún son insuficientes para regresar a los niveles de empleo auxiliar que llegaron a generar los astilleros públicos de la ría ferrolana. Y aunque hay expectativas de lograr nuevos encargos tanto en el sector de la eólica marina como en la construcción de buques militares, se espera un nuevo bajón de empleo en las plantas en torno al verano, ya que aunque se firmasen nuevas obras, la fecha de arranque de los trabajos en los talleres se demorará unos meses.