Cuatro siglos de Pasión en Ferrol

Bea Abelairas
B. abelairas LA VOZ

FERROL CIUDAD

<span lang= es-es >Un repaso prolijo de la trayectoria de las cofradías</span>. El pregonero, el profesor del Tirso e historiador Emilio Fernández Díaz, rememoró los orígenes de la Semana Santa y repasó la historia de cada una de las cofradías y de los pasos.
Un repaso prolijo de la trayectoria de las cofradías. El pregonero, el profesor del Tirso e historiador Emilio Fernández Díaz, rememoró los orígenes de la Semana Santa y repasó la historia de cada una de las cofradías y de los pasos. césar toimil< / span>

El pregón de la Semana Santa abarrotó la concatedral de San Julián en la primera cita de la edición de una Fiesta declarada de Interés Turístico Internacional

12 mar 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

El primer acto de la Semana Santa de Ferrol tuvo lugar ayer en la Concatedral de San Julián con un pregón bien sentido y que apenas dejó datos en el tintero de una tradición con cuatro siglos de historia documentada. El pregonero, el profesor del Tirso e historiador Emilio Fernández Díaz, comenzó citando una de sus publicaciones basada en el documento que se guarda en el archivo de la Concatedral y que data de la primera semana de Pasión ferrolana en el 1616.

Antes que Fernández Díaz tomó la palabra el presidente de la Junta General de Cofradías y Hermandades, César Carreño, que destacó que estamos ante una tradición popular que «mantiene muchas características de la villa pesquera que era Ferrol hace 400 años». El pregonero quiso situar en el tiempo la época en la que comenzaron los pasos a desfilar por las calles y apuntó su coincidencia con la muerte de Cervantes y William Shakespeare, ante una audiencia en la que las administraciones públicas estaban representadas en el exalcalde y conselleiro José Manuel Rey Varela y el presidente del Puerto, así como ediles populares.

La intervención apenas dejó fuera algún nombre de pasos o compañeros de un pregonero que fue rememorando sus vivencias en la Semana Santa desde que tenía cuatro años. «Mi recuerdo más remoto fue cuando vi la procesión de la Borriquita desde el balcón». Mencionó, asimismo, a las personas anónimas que han contribuido a mantener una tradición que, advirtió, es necesario redimensionar al tiempo que la Iglesia: «Toda la comunidad de creyentes somos iglesia y debemos convertirnos en una comprometida, valiente y actual». Algunas partes del discurso, en especial las más críticas, no dejaron indiferente a los asistentes que abarrotaron la concatedral.

El pregonero se acordó de las mujeres y de las creadoras de túnicas y hábitos, «que tuvieron su esplendor en los años 60 o 70 y que ya no se ven». Tuvo un sentido recuerdo para los músicos y las bandas que ya no existen. «Quiero reivindicar la gaita, un instrumento tan nuestro y del que se debería potenciar su sonido en nuestros cortejos», dijo poco después de recordar nombres de intérpretes como Antón Varela o Xoán Rodríguez Silvar.

Memoria

Fernández Díaz fue generoso en agradecimientos, pero reclamó un cambio en el «problema de memoria y recuerdo que tiene la ciudad». En contraste, quiso mencionar a cada uno de sus predecesores. El administrador diocesano de Mondoñedo, Antonio Rodríguez Basanta, rememoró otras épocas y la agrupación musical Nuestra Señora del Carmen puso el broche musical.

«De mi hermandad he sido todo, también cronista»

«Las mujeres pasaron de planchar túnicas, visitar sagrarios y ver pasar cortejos a ser protagonistas»

Emilio Fernández Díaz