Ferrol, muy lejos

Antía Urgorri Serantes
Antía Urgorri ACUARIO

FERROL CIUDAD

22 ene 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

María, vamos a llamarla así, es estudiante y trabaja en A Coruña en una tienda, aunque es de Ferrol. Tiene carné de conducir, pero el coche viejo que había heredado de su abuelo decidió morir antes del verano, y desde entonces no tiene más remedio que usar el transporte público cada vez que tiene que desplazarse desde la urbe naval a su puesto de trabajo.

Tiene serias dificultades para ajustar sus horarios laborales a los horarios del transporte público, ya que trabajar en un centro comercial supone terminar la jornada a las diez de la noche, no solo de lunes a viernes sino también algún domingo y festivo.

Pero eso no es lo más complicado de todo. Viajar en bus aún lo ha barajado y cogido en ocasiones, pero el tren, ni se lo plantea. Tendría que estar hora y veinte dentro de un vagón para poder llegar a la ciudad herculina. Ni ella ni sus amigas se lo plantean. Y eso que las estaciones de tren en ambas ciudades están céntricas, pero duplicar casi por tres el tiempo de viaje no parece una opción razonable.

Hace unos meses ha ido a Madrid a ver a unas amigas. Aunque partía de Ferrol, consiguió que su familia la acercase hasta A Coruña en coche para coger el Alvia y poder estar en la capital en poco más de seis horas. Si hubiese optado por iniciar el viaje en un vagón en la urbe naval y luego hacer transbordo, estaría dentro de un tren cerca de ocho horas.

Ferrol y A Coruña están cerca, sí, pero solo sobre el mapa. A nivel transportes públicos la distancia es insalvable. María ha optado por recurrir a Bla Bla Car y compartir coche. Paga 3 euros y en media hora está en su trabajo.