¿Brotes verdes o simples hierbajos?

Andrés Vellón Graña
Andrés Vellón CRÓNICA CIUDADANA

FERROL CIUDAD

12 ene 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

El paro tiene cara. Nombres. Y apellidos. Los números, gélidos, dan un reflejo de una situación. Pero después, cada uno sabrá de lo suyo. En nuestra zona son 16.888 las personas que no tienen empleo. Cierto que hace un año eran más. Cierto que nos venden una leve brisa en el panorama laboral. Pero cierto, también, que 16.888 son muchísimos ciudadanos. Igual es que hace ya tanto tiempo que las cifras del Inem surgen tan ingentes que puede que haya quien se acostumbre a ellas. Pero los que sufren a diario el problema, no.

Y si uno contrasta, por ejemplo, un discurso de Rajoy o de Feijoo hablando de recuperación con lo que se comenta en la calle, parece que colisionan dos realidades distintas. Dos planetas diferentes. ¿Será Ferrolterra una islote apartado de un mar de creciente bonanza? Seguro que no. Será, sin más, que apenas se generan puestos de trabajo y que ese descenso del paro obedece a múltiples factores. ¿Aparecen nuevos empleos? Sí, pero muy pocos. ¿Hay fuga de jóvenes y no tan jóvenes a otros lares para buscarse el pan? Mucha. Así son las cosas.

No se dan, hoy, las condiciones adecuadas para que se creen puestos de trabajo nuevos en la comarca. La reactivación del sector naval haría mejorar, y mucho, las perspectivas. Pero ha quedado ya más que demostrado que no es suficiente. Debe haber más cestas. Más de donde tirar por si vienen mal dadas. ¿Renunciar a los astilleros y su esencia? Nunca. Pero sí diversificar. Porque hace años y años que se habla de diversificar, pero no se ha hecho. Las recetas aplicadas en forma de planes e incentivos han sido ejemplo de fracaso.

Ferrol y su zona de influencia tendrían que disponer de una hoja de ruta, clara y realista, de puesta en marcha de nuevos sectores productivos. De un mapa de lo que hay, de lo que se puede potenciar y de lo que todavía no tenemos. Pero, claro, para eso hace falta rigor, consenso, iniciativa y liderazgo. Y eso que se dice de ir todos a una. Algo que, por aquí, no se estila. No anticiparse, no tener los escenarios previstos es, simplemente, estar a velas vir. Y así nos va.

Cuanto menos trabajo, menos población. Cuanta menos población, menos votos. Cuantos menos votos, menor atención por parte del Gobierno central y autonómico. Esa ecuación, que no les engañen, apenas falla. Y si encima de pocos, mal avenidos... A la inversión le da alergia el riesgo. Y eso, en Ferrol, se sabe bien.

¿Brotes verdes? Pues serán del asomo de hierbajos en las parcelas que quedan por ocupar en Río do Pozo, porque por aquí otros no se ven. Hay 16.888 argumentos, con cara, nombre y apellidos, que así lo corroboran.