La bonanza del tiempo merma la venta de estufas y ropa de abrigo

FERROL CIUDAD

La distribución de gasóleo para calefacción se redujo considerablemente, al igual que el consumo de electricidad

26 dic 2015 . Actualizado a las 05:00 h.

Con el mes de diciembre a punto de concluir, las lluvias siguen ausentes y el frío todavía no ha llegado, salvo algunos días en los que bajaron levemente las temperaturas. Esta anómala bonanza meteorológica está causando mella en algunos sectores relacionados con el frío, como es el de las calefacciones o la ropa de abrigo.

En el caso de los equipos de climatización, la venta de estufas y calefactores descendió notablemente respecto a años anteriores, así como el suministro de gasóleo para calefacciones y también el consumo de energía eléctrica.

En Star Center aseguran que la gente no viene con las urgencias de otros años en los que la venta de radiadores se disparó con la llegada de los primeros fríos. Los que sí están comprando son los que viven en las zonas rurales, en las que las casas son más frías por la humedad.

Estufas de leña o de pellet

En el hipermercado Alcampo las ventas de estos equipos descendieron entre un 15 y un 20% y en Brico Depôt lo que se está vendiendo bien son las estufas de leña o de pellet, mientras que en materia de calefactores casi no hay negocio. En cuanto al gasóleo para calefacción, ocurre que las últimas recargas se realizaron en el mes de agosto, cuando el combustible estaba a un precio muy bajo, y desde entonces en la mayoría de los casos no se volvió a reponer, a pesar de que vuelve a haber buenos precios. De ahí que los resultados de noviembre y diciembre se califiquen de malos para este sector.

El consumo de electricidad registró, asimismo, una bajada, como consecuencia de que mucha gente calienta los hogares con equipos eléctricos. No obstante, por el momento no pueden hablar de cifras porque las revisiones de los contadores se suelen realizar cada dos meses.

Otro método muy utilizado en la zona rural para calentar las casas son las cocinas de leña, las llamadas bilbaínas. El vecino de Mandiá Agustín Varela señalaba a este periódico que comenzó a encenderla en diciembre, cuando otros años ya lo hacía desde septiembre u octubre.

Katiuskas

Por lo que respecta a la ropa de vestir, más de lo mismo. Las prendas de abrigo y el calzado de agua, como las katiuskas, siguen en los escaparates y los almacenes de las tiendas.

Cristina Chas, de Carpe, asegura que la venta de las prendas de exterior -abrigos, chaquetones y gabardinas- bajó en torno a un 70% por el retraso en la llegada del frío y a estas alturas por la proximidad de las rebajas. En este establecimiento salvaron la temporada gracias a la ropa de hogar -sábanas, toallas y mantelería-, que está saliendo bastante bien porque con los días tan cortos la ropa tarda mucho en secar.

En Adolfo Domínguez también se está notando la ausencia del frío y la lluvia. «La gente se apaña con lo que tiene y los exteriores los tenemos todos aquí», comenta una empleada, añadiendo que la meteorología influye mucho en este sector. Lo mismo piensa un empleado de la tienda Cotton, que señala que estos negocios estacionales se mueven mucho por la meteorología, aunque en los últimos años también se está notando la crisis.

Las zapaterías también se han visto afectadas. Marian González, de calzados Pepe Rodríguez, señala que las ventas bajaron en todo tipo de calzado, pero principalmente en el específico de la lluvia o el frío. Así, manifiesta que las katiuskas están prácticamente todas en la tienda. En las botas forradas también hubo un importante descenso de ventas.