La posibilidad de una venta a otro país queda ya totalmente descartada

La Voz

FERROL CIUDAD

07 oct 2015 . Actualizado a las 05:00 h.

La posibilidad de vender el portaviones Príncipe de Asturias a la Armada de otra nación, posibilidad que se puso sobre la mesa desde su llegada a Ferrol y su baja posterior del Listado Oficial de Buques de la Marina, ha quedado ya totalmente descartada.

Aunque hubo incluso delegaciones militares de otros países que se desplazaron hasta la ciudad naval para ver el barco, ninguna de las perspectivas abiertas cuajó, entre otras cuestiones porque esa comercialización llevaría aparejada una costosa reforma del navío.

El portaviones llegó a Ferrol el 8 de febrero del 2013 para que en el Arsenal local se procediese a su desarme completo y a la retirada de todos los elementos de valor o que pudiesen ser reaprovechados en otros buques o dependencias de la Marina.

La causa de su baja fue doble. Por un lado, el elevado coste de su mantenimiento, incluso cuando permanecía sin navegar en su base. Por otra parte, también fue determinante el hecho de que la Marina pudiese contar con el Juan Carlos I que, como el Príncipe de Asturias, fue fabricado en los astilleros locales de Navantia.

Se trata de un buque multiproprósito que, entre otras capacidades, tiene la de ejercer como portaviones. De hecho, en los últimos meses ha ensayado esta faceta en varias ocasiones.

De la suma de estos dos factores -combinada con la crisis económica y los recortes presupuestarios en Defensa- salió la decisión de dar de baja un portaviones que marcó historia en la Armada española y que ahora agoniza en Ferrol a la espera de ser desguazado.