«A porta deste alcalde vai estar sempre aberta», garantizó el nuevo regidor
15 jun 2015 . Actualizado a las 16:49 h.En un Concello que desde mañana abrirá «portas e ventás», que será «a casa do pobo, con acceso libre e paredes de cristal», Jorge Suárez se convirtió ayer en alcalde. Lo hizo con un discurso en el que tendió la mano a ciudadanos y oposición, pero con una defensa firme de los postulados de su organización. «No noso ánimo non está facer carreira política, nin o sectarismo nin a defensa de posicións partidistas», aseguró. No tuvo problema en apelar al espíritu de la Revolución Francesa y reclamar para Ferrol ese «grande concepto esquecido: a fraternidade, imprescindible para a construción colectiva dun Ferrol para vivir e para traballar». «Son tempos moi difíciles para Ferrol», reconoció. Y por ello, «agora máis que nunca precisamos da unión social e da falta de revanchismo político, de responsabilidade e altura de miras». Y para ponerle nombre y cara al sufrimiento del desempleo y la pobreza, asegura que «a porta deste alcalde vai estar sempre aberta, coa humildade suficiente para escoitar o que a xente ten que dicir, par empatizar na angustia e na pobreza e sentila como propio».
Desde la primera fila seguía atenta las palabras del flamante regidor su familia, especialmente sus hijos, Pablo y Xabier, para los que tuvo palabras con las que rebajó el tono político de su intervención: «Quero agradecerlles a paciencia de que estean sempre ao meu lado e que me aturen estes catro anos que veñen». Fue la única licencia que se concedió en una intervención muy política: «Comeza un novo tempo en Ferrol», advirtió. Con una apuesta por una «nova concepción política» basada en la «xustiza social» y en los servicios públicos como herramienta para mejorar la calidad de vida de los ciudadanos.
«Teremos a valentía de enfrontarnos a eses grandes monstruos que devoran os nosos recursos públicos e que xa están planeando sobre os estaleiros», garantizó. Y en esa lucha, decía más tarde, «confío en que todos, tamén o BNG, Ciudadanos e o PP, veñan canda nós cando haxa que emprender esa loita cos grandes ministerios».
A cada uno de los grupos dedicó también una referencia. La «lealdade e boa disposición dende o primeiro momento» de su socio de gobierno, el PSOE; el agradecimiento al BNG por apoyar la investidura «coa confianza posta nunha oposición construtiva»; el reconocimiento a su antecesor, José Manuel Rey Varela, por su «disposición e a súa cordialidade no traspaso de poderes»; y el deseo de suerte en su «andaina política» a la concejala de Ciudadanos, Ana Rodríguez Masafret. Grandes escritores se pasearon por la toma de posesión a través de las palabras de los políticos. Si Rey Varela parafraseaba a Torrente Ballester y su definición de la ciudad -«Ferrol es una ciudad lógica enclavada en una tierra mágica»- los referentes de Suárez fueron José Saramago y Albert Camus. «Debemos lanzar amarras sobre esa balsa de pedra da que falaba Saramago, na que estamos illados do resto do país, pero nin moito menos morta», declaraba. Y a medio camino entre el novelista y filósofo francés y Juego de Tronos ponía el broche a su intervención: «Esta cidade leva un inverno eterno e dende logo que merece un verán invencible».
Sestayo: «Un día trascendente»
Para la que será la futura teniente de alcalde, Beatriz Sestayo, el de ayer fue «un día trascendente para o cambio necesario desta cidade». Un cambio para el que comprometió la «coherencia, lealdade e compromiso» del PSOE. En sus escaños, asegura, «non nos sentaremos só concelleiros socialistas», sino que «estarán presentes» los trabajadores del naval, las personas pendientes de recursos a la dependencia, las mujeres que han visto limitadas sus capacidades y los jóvenes «que necesitan vivir e facer un proxecto vital en Ferrol». «Apostamos e cremos lealmente que o noso voto será útil e por iso apoiamos e votamos ao próximo alcalde de Ferrol», concluyó.