Benestar anula el contrato de las obras de la residencia de Caranza

FERROL CIUDAD

La Xunta no llegó a un acuerdo con la adjudicataria para modificar el proyecto

17 feb 2015 . Actualizado a las 05:00 h.

Las obras de la residencia de mayores de Caranza continuarán paralizadas durante un tiempo indefinido. Exactamente el mismo que tarden en volver a adjudicarse, ya que tal y como confirma la Consellería de Traballo e Benestar, el contrato con la actual adjudicataria, Decoraciones J. Bello S. L., se ha resuelto. Esto quiere decir que queda anulado, por lo que ahora tendrá que abrirse otro nuevo proceso de contratación. Es decir, hay que volver al mismo punto que atravesaba el centro hace más de un año.

El 30 de enero del 2014 se adjudicaba el proyecto a la mencionada empresa con un presupuesto base de licitación de 1.671.688,79 euros. Sin embargo tras el preparado de dos de sus plantas, que continúan inutilizables con sus 64 residentes trasladados a residencias privadas, el pasado mes de agosto los técnicos se percataron de que era necesaria una modificación del proyecto a raíz de unos detalles que no se habían contemplado.

115.000 euros más

Y es que se percataron de que existía un desnivel en dichas plantas, un escollo imprevisible según argumenta la Xunta, y que supone un incremento de 115.000 euros en el presupuesto dado que incumbe a la instalación de fontanería y electricidad. Desde entonces, Benestar se mantuvo en silencio. Pero ahora el departamento autonómico explica que durante estos siete meses Xunta y adjudicataria han sido incapaces de llegar a un acuerdo, a pesar de que la consellería esgrime haber hecho «todo lo posible» por conseguirlo.

Para ello, dicen fuentes de la Xunta, «la consellería tuvo que encargar la elaboración del modificado del proyecto y, a continuación, darle audiencia a la empresa para que esta diese su conformidad para llevar a cabo las obras según el nuevo proyecto modificado y los precios aplicados por la Administración». A la vista está que no se la dio, por lo que «se han iniciado los trámites pertinentes para la resolución del contrato con la adjudicataria, cuyos plazos dependerán del recurso que pueda plantear la misma a dicha resolución». Mientras tanto, los residentes seguirán pagando las consecuencias de esta falta de sintonía en torno a una reforma fundamental.

Traslado a centros privados

Los mayores trasladados ocupan plazas que, en algunos casos, se encuentran «a máis de cen kilómetros de distancia de Ferrol, co suplicio que supón para as familias e cos problemas de saúde que acarrean os traslados tanto de depresión como de adaptación a un novo centro». Esto lo dice el comité de empresa de Traballo e Benestar, que añade que esta circunstancia muchas veces reduce su esperanza de vida. Los representantes sindicales se unen así a las protestas por el parón de la intervención, y de hecho se entrevistaron con los grupos municipales de la oposición con el fin de que se presenten mociones al pleno con intervenciones de trabajadores que expliquen las consecuencias de mantener paralizadas unas obras que ya habían comenzado, «con buratos e paredes derruidas nas prantas».

Es «urxente e imprescindible», dice el comité, que las 191 plazas de las que dispone la residencia estén al servicio de los mayores. Además, denuncia el «trampeo» de ratios asegurando que hay ancianos declarados como válidos que ya son dependientes.