Más ahorro y menos subcontratación son dos de los pilares del programa
03 feb 2015 . Actualizado a las 11:37 h.La búsqueda de la rentabilidad para lograr una compañía competitiva a través de un cambio de modelo, que va a afectar a todas sus áreas. Ese es el objetivo principal del plan estrátegico de Navantia que comenzó a desarrollar en el 2014 y que se marca este ejercicio como clave para alcanzar el próximo el punto de equilibro en el que queden atrás las pérdidas que han venido acompañando al naval público en los últimos años.
plazo de vigencia
Un quinquenio. Los objetivos del documento final de trabajo de Navantia se han fijado para el período 2014-2018, para el que los gestores de la compañía pública establecen la necesidad de conseguir 642 millones de euros de contratación en el 2018, con unos ingresos de 1.448, unos resultados de siete millones y una ocupación de al menos el 89 % de su plantilla. Entre los fines específicos para este año se marca la obtención de ingresos por valor de 950 millones de euros.
trabajo
Reducir la subactividad. La falta de nuevos encargos que ha padecido la empresa en los últimos ejercicios ha reducido a cuotas mínimas la actividad de la plantilla directa. Durante el pasado año, solo el 56 % de los trabajadores directos de Navantia tuvieron faena y el reto que se marca la empresa es el de llegar a aumentar este año la cifra hasta el 76 %. Aún así, los costes por la subactividad lastrarán sus cuentas con un coste de 70 millones de euros. Por ello, Navantia ha definido un plan para reordenar sus recursos humanos. Entre otros, prevé eliminar la subcontratación por completo en el área de aceros, coordinación de construcciones, mecánica y pruebas, mientras que mantendrá la presencia de las auxiliares en las ramas de pintura, electricidad, habilitación y tubería.
reparaciones
Subir la facturación. El objetivo es facturar en el mercado gasista -en el que está especializado Ferrol- entre 47 y 51 millones de euros hasta el año 2018. Frente a los objetivos ambiciosos de incrementar cuota en otros segmentos, como el de cruceros, en el de los buques LNG solo se plantea el mantenimiento. Navantia aspira a incrementar un 10 % la rentabilidad y ha fijado unas nuevas tarifas con recortes de un 15 % para las subcontratas, lo que ha disparado las alarmas en las firmas de la comarca, algunas de las cuales ya han advertido de que no podrán asumir esos recortes.
nuevo programa
Extensión del Lean. Navantia ha optado por el programa Lean para sustentar el cambio de cultura industrial, para el que persigue la reducción de los costes -con un programa de ahorro- y también de los plazos de entrega como puntal de la competitividad.
ENcargos
Necesidad de más pedidos. Aunque en el 2014 se firmaron los primeros contratos después de la época de sequías, como el flotel de Pemex, los dos BAM o los componentes para la obra de eólica marina de Iberdrola, la empresa aún no ha logrado saturar sus instalaciones. Este año espera firmar el contrato de desarrollo de la ingeniería del megabuque para la Armada turca, cerrar el pedido de un buque gasero para Gas Natural y que a finales del ejercicio se rubrique la orden de ejecución de la fragata F-110. Navantia quiere cerrar alianzas en el off-shore para mejorar su posicionamiento en este sector.
formación
Nuevos cometidos. La empresa pública persigue la reordenación de sus recursos humanos, reforzando aquellas actividades que considera clave. Para ello, reducirá la subcontratación y realizará planes para determinar la sucesión del personal en los diferentes departamentos. Además, Navantia anuncia un plan de comunicación interna que pondrá en marcha durante este mismo ejercicio para extender el nuevo modelo de compañía pública que persigue entre todos sus trabajadores.