Llega el día más caluroso del verano

maría santalla REDACCIÓN / LA VOZ

FERROL CIUDAD

Las temperaturas subirán hoy hasta dos grados, aunque por la noche lloverá

02 sep 2014 . Actualizado a las 07:00 h.

Quienes estaban esperando que el sol apretase están de enhorabuena. Tras la jornada de calor intenso de ayer, la de hoy se presenta todavía más tórrida, hasta el punto de que buena parte de Galicia estará en alerta amarilla por altas temperaturas e incluso las comarcas que bordean el Miño a su paso por Ourense estarán en alerta naranja, puesto que podrían superar puntualmente los 39 grados. El nivel amarillo activado por MeteoGalicia afecta al valle del Miño de Pontevedra, el litoral pontevedrés y el interior de A Coruña, con temperaturas que pueden superar los 34 grados, y a las comarcas de Valdeorras, sur de Ourense, el sur de Lugo, el noroeste de Ourense y el interior de Pontevedra por temperaturas que podrían elevarse por encima de los 36 grados entre las doce del mediodía y las nueve de la noche.

El calor será consecuencia de las altas presiones que siguen afectando a la comunidad gallega, así como a la entrada de aire africano. Sin embargo, esas altas temperaturas y la presencia de aire frío en las capas altas de la atmósfera tendrán como consecuencia la aparición de inestabilidad. De este modo, aunque los amantes del sol y la playa podrán disfrutar de la jornada de hoy, al cielo despejado de la mañana irán asomándose a partir de mediodía nubes de tipo medio y alto que en las últimas horas pueden dar lugar a fenómenos tormentosos y lluvias en toda Galicia.

Dos grados más

Además de para las tormentas nocturnas, el protagonismo es hoy para las temperaturas, que subirán hasta dos grados en algunos puntos con respecto a las ya elevadas de ayer, originando el que se espera que sea el día más caluroso en lo que va de este verano que apura ya sus últimos días. Así, en Santiago se espera que la máxima alcance los 34 grados, igual que en Vigo y Pontevedra. En Ourense se alcanzarán los 37 de ayer, en Lugo la previsión eleva los termómetros hasta los 33 grados, en A Coruña hasta los 30 y en Ferrol hasta los 31. Son temperaturas altas para adentrarse en el mes de septiembre, igual que lo son las mínimas previstas, que serán de 14 grados en Lugo, 17 en A Coruña, Ourense y Ferrol, 18 en Santiago, 20 en Pontevedra y 21 en Vigo.

Las cosas cambiarán mañana. Las altas presiones se desplazarán hacia el norte, un movimiento que permitirá la entrada en Galicia, a través de las Rías Baixas, de aire marítimo cargado de humedad, que dará lugar a nubes bajas y nieblas, mientras que en el interior habrá tormentas que afectarán sobre todo a la provincia de Lugo. Las temperaturas continuarán siendo elevadas, pero no tanto como ayer y hoy. En Ourense se prevé que los termómetros marquen los 33 grados, 30 en Lugo, 28 en A Coruña y Ferrol, 26 en Vigo, 25 en Pontevedra y 24 en Santiago. El jueves las temperaturas seguirán moderándose, y aunque todavía es pronto para una predicción totalmente fiable, en principio se aguarda que para el fin de semana se recupere la situación anticiclónica y las temperaturas vuelvan a subir.

Con respecto a lo ocurrido ayer, el intenso calor reunió en playas, ríos y parques de toda Galicia a miles de personas que buscaban un lugar en el que refrescarse y a otras que pretendían disfrutar de un sol y un calor que consideran que este verano han sido demasiado esquivos. En Ourense, el observatorio de la red de MeteoGalicia marcó 39 grados de temperatura máxima, mientras que en Ferrol, Vigo y A Coruña se registraron 28, en Santiago, 33; en Pontevedra, 22; y en Lugo, 30.

Así las cosas, parece que los mejores días del verano van a vivirse en este inicio de septiembre, puesto que a lo largo de todo el verano, y salvo en jornadas puntuales, las temperaturas fueron agradables pero suaves, con muy pocos días de calor intenso.

Afortunadamente, el fuerte calor de la jornada de ayer no llegó acompañado con incendios forestales de importancia. Este verano no se ha caracterizado, al menos de momento, por haber sido especialmente duro en el apartado de fuegos. Las lluvias que salpicaron toda la estación alternándose con días de sol aminoraron un peligro que podría acentuarse si el tiempo seco continúa.