Hevia regresa a lo grande en Ferrol

P. A. L.

FERROL CIUDAD

31 ago 2009 . Actualizado a las 19:46 h.

Imposible tener mejor debut que Alberto Hevia en el Rali de Ferrol. Después de ocho meses de pruebas, estrenó su Skoda Fabia con un triunfo emocionante, arrebató el título en el último tramo a Sergio Vallejo (Porsche 911) por solo cuatro segundos de diferencia y pudo dedicar el triunfo a su hija recién nacida. Enrique García Ojeda (Subaru Impreza) completó el podio, con el coruñés Iván Ares (Mitsubishi Lancer Evo X), de 23 años, cuarto. El presidente de la Escudería Ferrol, el ex piloto Germán Castrillón, celebró el éxito de la prueba en su cuadragésimo aniversario, y estimó que reunió a «entre 30.000 y 40.000 personas a lo largo de las dos jornadas».

«Con un podio ya habríamos firmado. Pero fuimos de menos a más y, después de solucionar un problema con los frenos, nos fue muy bien», celebró Hevia.

Pons inició la segunda jornada como había terminado la primera, con scratch . Sacó más de 20 segundos al resto de favoritos en el tramo Monfero-Irixoa, con un firme muy roto que propició muchos pinchazos.

El siguiente trecho, Monfero-Monfero, parecía sentenciar la carrera, de nuevo con Pons como el más rápido, y con más de 40 segundos sobre Vallejo. Hevia ya empezaba a sentirse cómodo y tomaba posiciones como tercer clasificado provisional. «Íbamos con la paranoia de no tocar ninguna cuneta porque nos quedaríamos tirados», confesaba el asturiano.

Otro vencedor moral

Antes de terminar la prueba se tenían que dar otras dos pasadas a cada uno de los tramos del día. Sin embargo, al salir del parque de asistencia, una fuga de aceite dejaba fuera de carrera a Pons, que abandonó. Tenía tal ventaja que otros pilotos lo consideraron el vencedor moral. Parecía servir el título a su compañero de equipo, Vallejo. Pero fue Ojeda el que marcó scratch en el segundo paso por Monfero-Irixoa, mientras que Hevia recortaba tiempo y ya estaba a segundo y medio de Vallejo. Allí, el lucense Pedro Burgo chocó «contra un murillo», era evacuado al hospital Arquitecto Marcide y recibía después el alta con «una contusión en las costillas», según explicó a primera hora de la tarde. Un accidente de Alberto Otero propició después la neutralización del tramo.

Tal como se había anunciado, el último trecho fue decisivo. Hevia remontó, Vallejo celebró un dulcísimo segundo puesto -con sus dos grandes rivales por el Campeonato de España, Pons y Fuster, retirados-, y García Ojeda completó el podio.