El proyecto se pone de largo

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FOTOS: RAFAEL ESTÉVEZ

Crónica | El acto Accionistas, directivos de empresas y autoridades participaron ayer en la primera ceremonia oficial que se celebra en Reganosa con motivo del arranque en pruebas de la terminal

10 may 2007 . Actualizado a las 07:00 h.

?ras 38 meses de obras de construcción y los tres últimos días en tensión por los incidentes en la ría con el Galicia Spirit , Reganosa se puso ayer de largo para compartir con accionistas y representantes políticos -como el alcalde de Ferrol, Juan Juncal- y empresariales de Ferrolterra el arranque en pruebas de sus instalaciones. No fue una inauguración oficial, pero sí la primera ceremonia pública en sus nuevas dependencias. Directivos de los socios que componen Reganosa, el conselleiro de Innovación y un pequeño grupo de autoridades recorrieron la regasificadora e incluso se subieron al primer metanero que llega a la planta. No es habitual que un buque gasero en proceso de descarga de su combustible reciba a una comitiva, pero ayer fue una ocasión singular. Félix Alonso pronunció un discurso plagado de mensajes contundentes, pero también se dejó llevar por la emoción cuando recordó que el proyecto de Reganosa no hubiera sido posible sin superar el tradicional minifundismo empresarial. También evocó el esfuerzo realizado por el « iniciador» del proyecto, Roberto Tojeiro, y por el ya fallecido Mauro Arias, que fue primer consejero delegado de la compañía. Pese al lógico nerviosismo del estreno, el rostro de la joven plantilla de la regasificadora ferrolana no ocultaba satisfacción por el arranque de un proyecto en el que algunos participan desde hace años. Alonso no dejó escapar la oportunidad de valorar la cualificación y el empuje de su gente y evocó a García Márquez que había escrito que «de la ilusión no se come, pero alimenta». Alonso admitió que la llegada del barco a los muelles de Punta Promontoiro abren la última fase del proyecto de ejecución de Reganosa, aunque los mayores esfuerzos llegarán después, cuando comience la operación comercial, en pocos meses. Entonces se cortará la cinta de la inauguración oficial.