El homicida se escondió entre dos coches para aguardar la llegada de Jesús Rivas
16 sep 2006 . Actualizado a las 07:00 h.Jesús Rivas López no podía pensar que iba a encontrar la muerte de esta manera. Este portero de discoteca ferrolano de 49 años pereció ayer de madrugada cuando un joven salió de entre dos coches armado con una estaca en la mano y le asestó un golpe certero en la cabeza. La víctima concluía su jornada laboral en la sala Zebra, en el centro de Ferrol, y se dirigía a su casa, como cada fin de semana, en su ciclomotor. Pasaba un cuarto de hora de las ocho de la mañana cuando el agresor, que lo estaba esperando en la calle Coruña, próxima a la discoteca, salió a su paso. Un joven alto y de complexión fuerte, según la descripción facilitada ayer por el Cuerpo Nacional de Policía, abordó a Rivas con la rama de un árbol a modo de estaca, propinándole un golpe que desmontó a la víctima del vehículo. Una vez en el suelo, el agresor continuó golpeándolo con el palo. El homicida soltó la estaca y huyó corriendo de la escena. Al lugar fueron llegando poco a poco compañeros del fallecido y demás transeúntes que se encontraban en las inmediaciones, alarmados por los coches de policía y los servicios sanitarios que se desplazaron al lugar del suceso sin poder hacer nada por la vida de Jesús. Desde la comisaría local de policía se anunciaba ayer que miembros del cuerpo se encontraban investigando intensamente el crimen para detener al agresor. Para esto, los agentes de la comisaría ferrolana cuentan con el testimonio de varios testigos oculares que pasaban por el lugar del suceso en el momento de producirse los hechos. Las causas que pudieron impulsar al homicida a atacar al portero de esta manera todavía se desconocen. Fuentes próximas a la discoteca declararon ayer que la noche del viernes al sábado había sido tranquila y había transcurrido sin altercados. No obstante, la policía no descarta que la agresión fuera fruto de una venganza por alguna rencilla registrada en un día anterior. La autopsia Tras el levantamiento, el cadáver de Jesús Rivas fue trasladado al centro hospitalario Arquitecto Marcide, en donde se le practicó la autopsia a media tarde para determinar las causas exactas del fallecimiento. El cuerpo de la víctima fue trasladado a última hora al tanatorio, en donde será velado hasta el momento de darle sepultura. La discoteca Zebra, una de las más antiguas de la ciudad de Ferrol, decretó ayer una jornada de luto.