Navantia mejorará las gradas de Fene para su primera botadura en 13 años

Beatriz García Couce
Beatriz Couce FERROL

FENE

Los cilindros de acero que componen las estructuras, envueltos por los andamios.
Los cilindros de acero que componen las estructuras, envueltos por los andamios.

La planta lanzará al mar piezas de éolica marina el próximo ejercicio

07 nov 2015 . Actualizado a las 05:00 h.

Agosto del 2003. Fue la última vez en que se llevó a cabo una botadura desde las gradas del astillero de Fene, entonces una pequeña plataforma para Statoil destinada a soportar una planta de gas flotante. La empresa noruega será la responsable de que el próximo año vuelva a celebrarse un lanzamiento al mar desde esas instalaciones. No será un barco, sino las superestructuras para el primer parque eólico marino flotante que promueve en Escocia y que han sido encargadas a la antigua Astano. Se trata de una obra que arrancará el próximo febrero y que requerirá, según explicó ayer el director del programa, Pablo Rivera, la mejora de las gradas. Además, aunque inicialmente se había planteado la opción de remolcar las superestructuras sobre las que van a ir anclados los aerogeneradores hasta su puerto de destino, Rivera desveló que el armador sopesa ahora hacer un transporte especial, para el que se precisaría colocar los componentes «en medio de la ría» y después, como ya se hizo con los megabuques australianos, izarlos a una plataforma que se encargaría de su transporte.

El arranque de ese contrato permitirá elevar el empleo de las obras de eólica marina de las 400 personas que trabajan actualmente en el astillero y en la antigua Imenosa hasta 700. Estas cifras fueron aportadas ayer en el transcurso de una visita que realizó a la factoría el conselleiro de Industria, Francisco Conde, quien saludó el camino de la diversificación emprendido por Navantia en el ámbito de la eólica marina y la colaboración estrecha en este negocio de los astilleros, la industria auxiliar y la Universidad.

En estos momentos, la factoría de Fene tiene en ejecución seis jackets -las estructuras sobre los que se asientan los aerogeneradores en la mar- y las seis piezas de transición -que se hacen en la antigua Imenosa- para el parque Wikinger de Iberdrola. El primer componente completo estará listo a mediados del próximo mes, después de que la empresa haya superado ya el 30 % del programa, que implica la construcción de 29 jackets. Su director, Raúl Rico, subrayó el reto logístico que implican las obras de eólica marina. Explicó que solo el encargo de Wikinger implica la gestión del transporte de 31.000 toneladas de acero que llegan al astillero desde Asturias en 4.000 camiones y las 116 rutas que han de salvar piezas de 30 toneladas desde talleres locales. «Desde el punto de vista logístico es un proyecto sumamente complejo», afirmó Rico.

Taller de bloques planos

La obra de Statoil será concentrada en el taller de bloques planos, en el que Navantia instalará una nueva línea de fabricación para las enormes piezas, que tendrán 15 metros de diámetro y unas 600 toneladas de peso. Estarán entregadas en marzo del 2017.