Navantia ha logrado cuatro contratos en medio año y espera el quinto para este mismo mes
27 jun 2015 . Actualizado a las 05:00 h.Después de los años horribles que vivió el naval de la ría por la falta de contratos y que tuvo su momento más dramático en diciembre del 2013, cuando los dos astilleros públicos gallegos se quedaron paralizados, el sector ha vuelto a la senda de la contratación, con cinco encargos desde el 2014, cuatro de los cuales se sellaron en los últimos seis meses. Pese a que el trabajo está empezando a retomarse en ambas factorías, estos encargos distan mucho de generar la ocupación de los grandes programas militares que durante la década pasada propiciaron faena para toda la plantilla directa de ambos astilleros y para unos 3.400 trabajadores de compañías auxiliares. Fuentes sindicales confirmaron ayer que, en lo que va de año, la cuarta parte de la plantilla de los trabajadores del área de construcción naval continúa sin faena. No obstante, algo empieza a moverse en las factorías, que con la eólica marina acaba de sumar un nuevo segmento de negocio a su cartera.
el flotel
El encargo más polémico. La firma de un acuerdo entre la Xunta y la petrolera mexicana Pemex, en plena campaña de las pasadas elecciones autonómicas, para favorecer el sector naval gallego, provocó grandes expectativas en unos astilleros con dificultades y una polémica aún mayor. El encargo de construcción de sendos floteles en Navantia y la viguesa Hijos de J. Barreras se adjudicó en enero del 2014 y fue el primero que vino a romper la sequía en las factorías de la ría iniciada en el 2007, cuando se contrató el último encargo para la fabricación de dos megabuques australianos. En estos momentos, Navantia ya ha superado el 40 % de la ejecución del navío, que emplea a medio millar de personas. La compañía pública está barajando adelantar la botadura que estaba fijada para octubre hasta agosto, aunque aún no está decidido. Habitualmente, cuando se acercan las ceremonias de lanzamiento al mar de los buques, el número de empleados crece exponencialmente en las obras.
el bAM
La primera obra para la Armada en ocho años. El 5 de diciembre del pasado año, y después de meses de incertidumbre, el Gobierno firmó con Navantia sendos contratos para la fabricación de dos Buques de Acción Marítima (BAM), cuya fabricación comenzó ese mismo día. Sin embargo, las tareas apenas han avanzado, según han denunciado reiteradamente los sindicatos y no está previsto que antes de finales de año coja buen ritmo.
eólica marina
De estreno en Fene. Pocos días después, en concreto el 18 de diciembre, Iberdrola firmó con Navantia la construcción de 29 jackets -estructuras que sujetan a los aerogeneradores en alta mar- para su parque eólico marino alemán de Wikinger. Medio año después, en concreto el pasado jueves, el astillero de Fene dio el pistoletazo de salida a la obra, que prevé emplear a una media de medio millar de trabajadores, aunque mayoritariamente serán de compañías auxiliares. Con este encargo, la factoría estrena un nuevo mercado, el de la eólica marina. El pedido se desarrollará hasta julio del próximo año.
LHD para turquía
Un año y medio de espera. En diciembre del 2013, el Ministerio de Defensa de Turquía seleccionó a Navantia y al astillero del país Sedef para la construcción de un buque anfibio similar al Juan Carlos I español. Las negociaciones para cerrar el encargo se se desarrollaron hasta el pasado 7 de mayo, cuando se firmó el encargo. Navantia se ocupa del diseño, la transferencia de tecnología y la asistencia técnica al astillero turco, en donde se fabricará el navío. El encargo genera ocupación para unos 80 técnicos en el astillero ferrolano, aunque también propicia ocupación para otros departamentos de la compañía pública, como la división de sistemas y la fábrica de motores.
obra para statoil
El segundo pedido en la eólica «off-shore». El pasado día 17, el gigante noruego energético Statoil adjudicó a Navantia la construcción de cinco estructuras tipo Spar para el que será el primer parque eólico flotante del mundo, y estará situado en Escocia. Lo promueve Hywind Scotland, filial de Statoil, y supondrá al menos 14 meses de ocupación para unas 300 personas en el astillero de Fene. La obra ha sido adjudicada a la alianza formada por Navantia y Windar Renovables y supone la consolidación de la compañía en el segmento de la eólica off-shore.
Las perspectivas
Los petroleros. Navantia anunció en la campaña de las elecciones municipales un acuerdo con la naviera vasca Ondimar para la fabricación de cuatro petroleros, con opción a otros dos más, que se repartirían entre la ría de Ferrol y la bahía de Cádiz. Anunció que el contrato se firmaría en junio. Restan tres días para que se cumpla el plazo y se despeje si llega el tercer contrato del año.
la situación del naval de la ría la ocupación