El erizo, un recurso en alza para los marineros de Cedeira y las mariscadoras de Espasante

A. F. C. CEDEIRA / LA VOZ

CEDEIRA

PEPA LOSADA

Las malas condiciones del mar dificulta el trabajo de la flota cedeiresa, que tiene diez días para recolectar el equinodermo

13 mar 2020 . Actualizado a las 05:00 h.

Solo las cofradías de Cedeira y Espasante disponen de planes de gestión del Paracentrotus lividus, el popular erizo. En el primer caso, la explotación de este recurso se puede realizar en la modalidad de buceo con suministro de aire desde la superficie. La Consellería do Mar ha autorizado a tres embarcaciones, con seis tripulantes, a capturar este equinodermo. Disponen tan solo de diez días para hacerlo y las malas condiciones del mar han dificultado estos trabajos.

«Solo han tenido dos días de extracción por el mal tiempo. Ahora estamos empezando, es el primer plan de explotación del erizo, pero es un recurso en alza, que alcanza precios altos, nunca ha bajado de los nueve euros el kilo. La idea es ampliar bancos y zonas para que vaya a más», explica Paula Barreiro, bióloga, que presta asistencia técnica en el pósito de Cedeira. Hoy es el último día que pueden salir a faenar.

El tope por tripulante es de 50 kilos al día. En la rula cedeiresa se han comercializado en lo que va de año 171 kilos de erizos, con una facturación de 1.612 euros. El precio medio se ha situado en los 9,43 euros por kilo y la cotización máxima ha ascendido a 9.75, según los datos recogidos en la plataforma tecnológica Pesca de Galicia.

Las agrupación de mariscadoras de la cofradía de Espasante también cuenta con un plan de gestión del erizo, a pie. El ámbito que abarca va desde la isla de San Vicente hasta la punta Vilardeira. Los ocho profesionales autorizados para extraer este equinodermo han completado esta semana los tres días de extracción que les ha autorizado la Consellería do Mar, con un tope de 40 kilos al día. «Algunhas vendemos ao mesmo comprador do resto do marisco e outras van á lonxa de Burela», señala Rosa Trasancos, presidenta del colectivo.

En sacos por el acantilado

La recolección se ha centrado en la zona comprendida entre Ladrido y Loiba. «O ourizo é fácil de coller, o malo é cargalo, levámolo en sacos, pero subir polos cantís arriba con dez quilos ás costas non é doado», reconoce.