Cedeira ya ha vivido su mejor día del año

ANA F. CUBA CEDEIRA / LA VOZ

CEDEIRA

JACOBO AMENEIRO

Da igual a quien se pregunte, si a las pandillas más jóvenes o a las mesas de los más veteranos, la Xira de San Antón constituye, para la mayoría de cedeireses, la fiesta 10

18 ago 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

Quedan casi cuatro meses y medio para que finalice 2018, pero Cedeira ya ha vivido su mejor día del año. «Es el de la Xira de San Antón, el 17 de agosto», recalcan las Weisis, veinteañeras, preparadas para despedir la Patrona al atardecer cantando por el casco viejo al compás de las gaitas, «Son de Cedeira, son percebelleira...». De menú tienen empanada, pastelón o tortilla cocinada por sus madres. La siesta, dicen, está permitida. ¿Y ligar? «Nunca se sabe, las puertas no se cierran».

El monte de San Antón do Corveiro se reparte entre los muy jóvenes, que prefieren el bosque, y los no tanto, repartidos por el campo. Los Hostiles nunca se pierden la Xira: «La mayoría trabajamos fuera y siempre pedimos libre para esta fiesta». Aquí mandan los treintañeros, algunos ya con niños, ataviados con las camisetas naranja. Gusa y Male viven en Madrid, y a su lado están Román, Moc, Marina o Marcos, «el de Cariño -repiten, aunque él lo desmienta-, que trajo la nube». Comen churrasco, panceta, chorizos, tortilla y ventresca de bonito, y ellos tampoco se pierden la bajada a pie con las gaitas. En la mesa de los Brañas gobierna Lola, de 75 años, rodeada de hijos y nietos. «La Xira es de toda la vida, es el remate de las fiestas; nací en el centro del pueblo y para mí es el día más lindo de la Patrona», recalca. Aquí no faltan ni el churrasco ni las sardinas asadas. Y Maggie, la americana de la familia Brañas, ha preparado una tarta para celebrar su cumpleaños.