El frío se agudizó por el viento, con rachas de 97,1 kilómetros por hora en Cedeira
06 feb 2018 . Actualizado a las 14:23 h.La nieve se hizo esperar en la comarca. Las previsiones apuntaban a que las zonas situadas a más de 400 metros de altitud se teñirían de blanco la madrugada del sábado al domingo, pero no fue hasta el lunes cuando cayeron los primeros copos, que cubrieron únicamente la cumbre del monte Caxado, en As Pontes. Varios conductores que transitaban por la AC-101 se toparon, a primera hora de la mañana, con una fina capa de nieve sobre la calzada, que no les impedía circular, pero sí les obligaba a hacerlo con especial precaución.
La máquina quitanieves no tardó en limpiar la vía para prevenir incidencias, según confirmaron desde la Consellería de Infraestruturas. El viento, que sopló en dirección nornordeste, con rachas de 81 kilómetros por hora, agravó la sensación térmica, que cayó hasta los 4,1 grados bajo cero en la sierra de A Faladoira (en Ortigueira) durante la tarde de ayer. El termómetro se movió entre los 0,2 y los 4,5.
La temperatura osciló entre los 0,2 y los 4,5 grados en A Faladoira, en Ortigueira
«Iba con camiseta, camisa y cazadora de pana, y no pasé frío», comentaba un conductor aguerrido que aprovechó para subir hasta el radar de aviación civil, en O Caxado, el punto más elevado, donde se acumuló más nieve. «Pasé más frío en Grañas do Sor [en Mañón], sin nieve», agregó.
En la estación de Marco da Curra, en el municipio de Monfero, la sensación térmica descendió hasta los cinco grados bajo cero, con una temperatura que no superó los 2,5 grados (con mínimas de cero a lo largo de la jornada). «Frío vai moito, pero neve de momento non tivemos, vese no alto dos montes, cara á provincia de Lugo», señaló una vecina de la parroquia de Xestoso.
«Aquí caeu neve granulada, ao pé do mar», contaba un cedeirés, «aterecido de frío» a media mañana. El viento azotó con especial intensidad la costa de Cedeira, con rachas de 97,1 kilómetros por hora en la estación de Punta Candieira y una sensación térmica de poco más de cero grados.
Mientras algunos conductores detenían sus coches para pisar la nieve en O Caxado, desde el puerto de O Barqueiro se podía ver a varios kitesurfistas practicando en la playa de Arealonga, con fuerte oleaje. «Hacía tanto frío que cuando salías notabas calentita el agua de la ducha [del arenal]», explicaron varios deportistas, ya de retirada.