Varias granjas siguen inmovilizadas por la aparición de un caso de tuberculosis

A. F. C. CEDEIRA / LA VOZ

CEDEIRA

j. pardo

La Xunta ha iniciado el saneamiento de las explotaciones afectadas

25 oct 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

El saneamiento de las cabañas de las granjas del municipio de Cedeira inmovilizadas por la Consellería de Medio Rural a raíz de la aparición de un caso de tuberculosis en una vaca, en la sierra de A Capelada, ha comenzado. Y los ganaderos la afrontan entre el malestar por el impacto económico de la medida que les impide vender reses -salvo las destinadas directamente al sacrificio, en ningún caso para la recría (de terneros)-, y la resignación. «Os ánimos van regular, pero temos que facer o que nos mandan, non temos outra opción», reconoce Carlos Muíño, uno de los vecinos afectados por esta medida.

El foco de la enfermedad se detectó el pasado mes de junio y los servicios veterinarios oficiales procedieron a bloquear todas las explotaciones «relacionadas» de algún modo con el animal, por tratarse de un mal «de alta persistencia e sometido a un programa de erradicación». Medio Rural explica que se trata de «medidas sanitarias de salvagarda, que inclúen a posta baixo vixilancia oficial da granxa, a prohibición de todo movemento ata ou dende dita explotación [salvo o directo a sacrificio ou a un cebadeiro non cualificado sanitariamente], así como a realización de probas e investigacións oficiais encamiñadas a confirmar a presenza ou ausencia da enfermidade». La decisión de la administración autonómica suscitó las críticas de algunos ganaderos, por la distancia existente entre sus granjas y el lugar donde se detectó el caso de tuberculosis. Así se lo transmitieron a los técnicos que acudieron al Concello de Cedeira hace dos semanas, a propuesta del gobierno local, a quienes les reprocharon, sobre todo, la ausencia de explicaciones.

Medio Rural insiste en que algunos titulares de explotaciones de la sierra de A Capelada poseen, además, granjas localizadas «a certa distancia» del epicentro del foco, pero que podrían compartir «útiles, materiais, medios de transporte e coidadores», y transmitir así la enfermedad. Los técnicos se comprometieron a agilizar las pruebas epidemiológicas para poner fin a esta situación lo antes posible.