Los tripulantes del pesquero cariñés hundido se recuperan del susto en sus casas

Álvaro Alonso, I. Valerio, M. Cuadrado FERROL

CARIÑO

El Hermanos Landrove, en junio de este año en Cariño
El Hermanos Landrove, en junio de este año en Cariño CARLOS SOMORROSTRO

Cuatro tienen su residencia en Cariño, dos en Burela y uno en Celeiro

20 nov 2018 . Actualizado a las 18:04 h.

Los siete tripulantes del barco que sufrió una vía de agua esta madrugada se recuperan del susto en sus casas. Según ha podido saber La Voz, ya están con sus familias, intentando volver a la calma tras un susto que fue «muy grande». De hecho, todos ellos han preferido guardar silencio tras lo sucedido. Cuatro viven en Cariño, dos en Burela y uno en Celeiro, lugar este último en el que el Hermanos Landrove tiene su base.

La armadora del barco, Sonia Landrove, ha trasladado que todavía desconocen lo que pudo ocurrir y que el navío se da por perdido. «No sabemos nada, solo que había agua en la sala de máquinas», ha mencionado esta mañana en Radio Voz.

Mientras, el patrón mayor de Cariño, Javier Pita, ha confirmado lo sucedido. En una inspección rutinaria, el patrón del Hermanos Landrove descendió a la sala de máquinas, cuando encontró el agua. Intentaron achicarla, pero pronto gripó el motor. A partir de ahí, la vía fue imparable hasta provocar el hundimiento del pesquero. En Salvamento Marítimo se encargó del rescate a 20 millas al norte de cabo Ortegal, sobre las cinco de la mañana.

Mientras, el patrón mayor de la cofradía de pescadores de Celeiro, Domingo Rey, intentó contactar con los armadores del buque. A mediodía poca información más manejaban en el pósito mariñano a mayores de la que iban conociendo por los medios. «Nós chamamos á armadora para ter máis datos do sucedido e tamén para brindarlles a nosa axuda en todo canto puideramos», manifiesta el patrón mayor.