Los profesionales de Cedeira y Cariño atribuyen a los temporales la falta de cría en las rocas y temen el impacto económico si la situación no se revierte cara al verano
06 jun 2018 . Actualizado a las 05:00 h.«El mal tiempo hizo estragos y no hay fijación del percebe. En Os Aguillóns queda bastante, porque están más resguardados, pero en la costa parece que está arrasado», relata Juan Carlos Pardo Galdo, percebeiro y patrón mayor de la cofradía de pescadores de Cariño. «Este ano hai pouco percebe e vese pouca cría, a estas alturas do ano tiña que haber algo máis, polo menos cría pequena. Non se sabe se é por mor dos temporais que non agarrou», apunta Antonio Tojeiro, profesional del pósito de Cedeira.
En las últimas semanas, a los percebeiros de Cariño y Cedeira les ha costado completar el cupo diario. «Para coger el tope te las ves y te las deseas», reconoce Pardo Galdo. Tojeiro comenta que la situación es similar en otras cofradías: «Quéixanse do mesmo, non é que afecte a unha zona en concreto, que podía ser esquilmada, senón que parece ser algo más xeneralizado». Las perspectivas cara al verano, coinciden, «non son moi favorables».
Los profesionales del sector temen el impacto económico si la situación no se revierte antes de la inminente campaña estival. Los ingresos por la venta de percebe representaron en 2017 el 31,5 % de la facturación del pósito de Cariño, con 356.356 euros (del total de 1.129.951). En Cedeira supusieron el 23,8 %, con 1.619.585 euros, frente al global de 6.777.353.