Dentro del «cerebro» que controla la gran central térmica de As Pontes

J. C. M. AS PONTES / LA VOZ

AS PONTES

JOSÉ PARDO

Exitosa jornada de puertas abiertas en la unidad de producción de Endesa

10 jun 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

Hasta 235 personas tuvieron ayer la oportunidad de acceder a la sala de control de la central térmica de As Pontes. La jornada de puertas abiertas sirvió para divulgar entre los vecinos y el conjunto de la ciudadanía el trabajo que se realiza en la planta de Endesa, al tiempo que se explica el esfuerzo de la compañía por adaptarse a los últimos requerimientos medioambientales en materia de emisión de gases.

De la mano del equipo directivo de la central, con Marcello Rinaldi al frente, durante toda la mañana distintos grupos conocieron un poco más de cerca la evolución de la térmica pontesa, una planta que, como se señalaba, «ha vivido desde su apertura, en continuo proceso de mejora» y que afronta en estos momentos su tercera gran transformación, tras la vivida en los noventa y la del en 2007, cuando cesó la explotación minera. Ahora se trata de reducir de forma significativamente la emisión de gases y alargar la vida de la instalación.

Hubo un público heterogéneo, en el que no faltaban antiguos trabajadores de la empresa, muchos vecinos ponteses, gente que siempre tuvo curiosidad por ver cómo era la central e incluso empleadas actuales que aprovecharon para que su familia, pequeños incluidos, conocieran un poco más de la térmica, pieza central en la vida de la villa y en la economía de toda Ferrolterra.

Las primeras explicaciones llegaban al pie de una espectacular maqueta. Fue un repaso amplio que abarcó desde la utilidad de las cuatro torres de refrigeración que, junto a la impresionante chimenea conforman la imagen de la villa, a las plantas que está construyendo Endesa para «absorber» gases como el de azufre que, en el futuro, se transformará en yeso para la construcción. Ya está en marcha la cimentación de las mismas y, en cuestión de dos semanas, como anota Rinaldi, comenzarán los montajes mecánicos. El conjunto de los cambios, en los que se invertirán 217 millones de euros, estará listo a mediados de 2020.

Con todo, lo que despertó mayor interés fue el acceso, ataviados con el correspondiente casco y tapones, primero a la sala de turbinas y, después al «cerebro de la planta». Una de las salas de control desde donde se supervisa, con ayuda de enormes pantallas, «la situación en tiempo real de lo que está pasando».

El éxito de la jornada de puertas abiertas -«una buena práctica de Endesa»- hizo preciso doblar el número de participantes.