Endesa liga su plan industrial para el lago a la recuperación energética

Beatriz García Couce
Beatriz Couce FERROL

AS PONTES

Vista del lago de As Pontes
Vista del lago de As Pontes ANGEL MANSO

La eléctrica cuenta con un estudio para una central de bombeo en la zona

17 may 2015 . Actualizado a las 05:00 h.

Una de las consecuencias de la crisis económica que durante los últimos siete años ha determinado la marcha del país ha sido el desplome de la demanda eléctrica. Las compañías energéticas han replegado sus inversiones en España debido a la sobrecapacidad de generación eléctrica instalada y se han volcado en actuaciones en el extranjero.

Así, muchos de los proyectos que empezaron a barajar las compañías eléctricas se quedaron encima de la mesa, a la espera de que la demanda comience a recuperarse y a que las necesidades energéticas repunten de forma que en sus planificaciones a medio y largo plazo vuelvan a tener cabida.

Es el caso de la central de bombeo que barajó Endesa para el lago de As Pontes, y que se dio a conocer en el mismo día en el que las autoridades inauguraban ese embalse, el artificial más grande de España, el 16 de mayo del 2013. Con una instalación de este tipo, se aprovecharía el exceso de energía eólica en las horas en las que desciende la demanda para bombear agua a un embalse y, posteriormente, usar la energía para la producción hidroeléctrica. La puesta en marcha de una central de bombeo de entre 300 y 600 megavatios de potencia precisaría de una inversión millonaria, una cuantía similar a la que va a destinar la compañía a la próxima reforma de su central térmica.

Requiere, pues, de un volumen de inversión muy elevado, que en estos momentos no viene respaldado por una necesidad real.

Sin embargo, la empresa mantiene intactos sus objetivos del aprovechamiento industrial del lago, y ya entonces aseguraba que, en el mejor de los escenarios, no vería la luz en un plazo inferior a cinco años. Se trata de una actuación cuya materialización va estrechamente ligada a la recuperación económica y, consecuentemente, al incremento de las necesidades energéticas.

Los planes de Endesa situaban además esta instalación en el entorno de la traída del río Meidelo al lago pontés.

Las estaciones de bombeo son idóneas para actuar de respaldo de la eólica, como sucede habitualmente con las centrales de ciclo combinado, que usan gas y vapor de agua para generar electricidad, las plantas que más han padecido la crisis del sector. La mayoría funciona a unas cuotas mínimas y algunas han sido incluso desmontadas.

Endesa sostiene que el embalse creado en el hueco que dejó la mina a cielo abierto que durante cuatro décadas funcionó en la villa pontesa ofrece muchas posibilidades, y no solo las turísticas y las medioambientales.

Así, el aprovechamiento energético del agua continúa siendo un objetivo al que no prevé renunciar.