Pero el caso tuvo un final feliz. Al amanecer de ayer aparecieron los dueños para reclamar a la res. «Levárona de madrugada», explicaron desde la granja pontesa al mismo tiempo que reconocieron que en la zona de O Caxado hay terneras adultas que tampoco están registradas, pastando libremente por los prados.
Para esta familia de O Freixo fue la primera vez que aparece una vaca extraviada entre su rebaño. Lo habitual es que se pierdan otro tipo de animales domésticos.