El curso que cambió la vida de Diego: «Tras tres años en el paro, por fin puedo pagar las facturas»

beatriz antón FERROL / LA VOZ

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Diego Salazar, retratado en Afundación, donde tuvo lugar el acto de clausura de los cursos formativos del plan de empleo de Secretariado Gitano
Diego Salazar, retratado en Afundación, donde tuvo lugar el acto de clausura de los cursos formativos del plan de empleo de Secretariado Gitano JOSE PARDO

Ante las dificultades para acceder al mercado laboral, llamó a la puerta de Secretariado Gitano en busca de ayuda, y gracias a una de sus formaciones, ahora tiene empleo en Alcampo

04 jul 2024 . Actualizado a las 16:44 h.

Las estadísticas dicen que seis de cada diez jóvenes de etnia gitana no consiguen finalizar los estudios de la ESO. Son cifras que preocupan, y mucho, a la Fundación Secretariado Gitano (FSG). Y por eso uno de los grandes empeños de la entidad se centra en romper esa tozuda estadística mediante un programa de refuerzo educativo que ya está poniendo freno al abandono y fracaso escolar, pero también en ofrecer oportunidades laborales a jóvenes que llevan años desvinculados de las aulas y no cuentan con formación ni experiencia en el mercado de trabajo.

Este era el caso de Diego Salazar Borja, un ferrolano de 26 años que tras cursar uno de los cursos organizados por el área de empleo de la delegación comarcal de la FSG ha logrado el primer contrato de su vida. «Vivo con mi mujer, y tras tres años en el paro, por fin puedo pagar las facturas y no tenemos que depender de la ayuda de la familia para poder vivir», explicaba encantado este miércoles por la mañana en la sede de Afundación, donde tuvo lugar la clausura de los dos cursos formativos organizados por Secretariado Gitano en lo que va de año.

Uno giró en torno a las actividades auxiliares de comercio y otro ofreció herramientas para trabajar como operario de almacén y logística. Este último fue el que cursó Diego y le abrió las puertas a trabajar en el hipermercado Alcampo de Ferrol. «Hice allí las prácticas y a lo pocos días de terminarlas ya me llamaron y me hicieron un contrato temporal. Estoy feliz porque mi objetivo era trabajar y lo he conseguido», apunta entusiasmado.

Los participantes en los cursos posaron en una foto de familia en Afundación
Los participantes en los cursos posaron en una foto de familia en Afundación ELISA PIÑÓN

Diego cuenta que abandonó la ESO a los 15 años, porque «sacaba malas notas y no estaba motivado». «Era muy niño y no me daba cuenta de lo importante que son los estudios para progresar en la vida», rememora. Después maduró y decidió retomar los estudios de la ESO en la escuela para adultos EPAPU de Caranza y también llamó a la puerta de Secretariado Gitano en busca de ayuda para dar el salto al mercado laboral. «Ismael, el mediador intercultural, me habló de los cursos y me animó a participar, al igual que Alejandra, la orientadora. Fue un acierto porque yo llevaba mucho tiempo enviando currículums y nadie me llamaba y ahora con este curso he logrado por fin mi primer contrato», dice agradecido.

Pese a que reconoce que los estereotipos siguen pesando demasiado sobre el colectivo, Diego cree que los obstáculos con los que se ha topado hasta ahora para acceder al mercado laboral no se deben a que es gitano, sino a su falta de formación. «Yo nunca me he sentido discriminado y creo que si Alcampo ha decidido contratarme es porque me formé con este curso y los jefes vieron que en las prácticas me esforcé, fui responsable y trabajador. Por ahora solo tengo un contrato temporal, hasta septiembre, pero por algo se empieza», comenta con la esperanza de poder continuar en la empresa que le ha brindado la primera oportunidad.

Crece el número de empresas que colaboran con prácticas: «Las que prueban, repiten»

El acto finalizó con una actuación de baile flamenco
El acto finalizó con una actuación de baile flamenco ELISA PIÑÓN

Hace un año, Gisela Manzano Conchado llegó a la delegación ferrolana de la Fundación Secretariado Gitano con muchas inseguridades, miedos y poca confianza en sí misma. Hoy en día esos temores se han desvanecido, y gracias a su esfuerzo, esta joven de 20 años ha conseguido trabajo en la tienda de Springfield de Odeón, donde hizo las prácticas tras asistir a un curso formativo del plan de empleo de Secretariado Gitano en el 2023. Su caso mereció este miércoles un reconocimiento especial en la sede de Afundación, donde se celebró el acto de clausura de los cursos celebrados en el 2024: uno sobre Actividades auxiliares de comercio, al que asistieron 12 personas; y otro de Operario de almacén y logística, que contó con 14 participantes.

Financiados por el Fondo Social Europeo + Empleo Juvenil y también por Deloitte en el caso del curso de comercio, estos seminarios contaron con la colaboración de ocho empresas: Alcampo, Carrefour, Bricodepot, Construdeco, Galogística, Tiger, Women’s Secret y Springfield.

«Estamos muy contentos, porque aunque los prejuicios todavía siguen ahí y hay empresas que no quieren colaborar, cada vez son más las que sí lo hacen», dice con satisfacción María Mancebo, prospectora laboral de la FSG. «Las que prueban, repiten, porque ven que los jóvenes que asisten a estos cursos responden, son responsables y trabajadores y rompen con los estereotipos que existen en torno a las personas gitanas», añade Alejandra Goroicelaya, orientadora laboral.