«Cabreo» entre los propietarios de las Fragas do Eume: «Parque natural sí, pero respetando nuestros derechos»

A. F. C. PONTEDEUME / LA VOZ

FERROL

Los manifestantes se concentraron en la rotonda del puente de piedra, interrumpiendo el tráfico
Los manifestantes se concentraron en la rotonda del puente de piedra, interrumpiendo el tráfico JOSE PARDO

Varios decenas de afectados y responsables políticos de los cinco concellos se concentraron esta mañana en Pontedeume en demanda de compensaciones

11 oct 2023 . Actualizado a las 16:52 h.

«Parque natural, sí, pero respetando nuestros derechos». Este fue uno de los lemas coreados esta mañana en Pontedeume por decenas de propietarios de los terrenos que conforman las Fragas do Eume, con el respaldo de los alcaldes y de concejales de los cinco concellos que abarca, Cabanas, A Capela, Monfero, Pontedeume y As Pontes. El 80 % de la superficie del parque pertenece a particulares, que reivindican compensaciones económicas por las restricciones de uso de sus fincas que implica el Plan Reitor de Usos e Xestión (PRUX), que aprobó el pasado 2 de marzo la Xunta de Galicia.

«Pretenden compensarnos [con 1,1 millones de euros] durante los dos primeros años de vigencia del plan por las 400 hectáreas de zona de reserva y más de tres mil de uso limitado, y después no sabemos», declaró Ángeles Pita, presidenta del colectivo Parque Natural del Eume: Naturaleza y Desarrollo, que representa a parte de los afectados por esta situación. En algún cartel de los exhibidos en Pontedeume se podía leer «Xunta, ladroa, a Fraga non se rouba». La cuantía destinada por la Consellería de Medio Ambiente, 1,1 millones de euros, a la compra de parcelas ha generado aún más indignación entre los damnificados.

Hipólito Oreiro, vicepresidente de esta misma asociación, recuerda que el precio de mercado de la zona de matorral oscila entre los 300 y los 350 euros el ferrado (equivalente a 548 metros cuadrados, en Monfero y As Pontes), lo que evidencia «que eses 1,1 millóns dos que falan son ridículos», como apunta otro perjudicado. Oreiro defiende la figura del parque, pero exige respeto para la propiedad privada y plantea medidas alternativas a la adquisición de terrenos, similares a las existentes en otras regiones de España, como «la cesión de uso de un terreno a Medio Ambiente, para que se ocupe del mantenimiento y la gestión de la finca y la plantación» y, a cambio, compense al dueño. «Si no te dejan plantar eucaliptos, una especie maderable en 12 años, y tienes que plantar carballos, que no puedes cortar hasta los 25 o 30, tienen que abonarte lo que sería el lucro cesante, por la menor rentabilidad», sostiene. Otra fórmula, expone, pasa por «la concesión de ayudas económicas para la eliminación de especies foráneas y el pago directo por la plantación de árboles autóctonos». Y se pregunta, además, por qué, «si las empresas reciben ayudas directas por la fijación de carbono, no puede aplicarse la misma medida con los propietarios».

En la protesta quedó claro el malestar de la gente. El alcalde de As Pontes y presidente de la Diputación, Valentín González Formoso, calificó el anuncio del departamento de Ángeles Vázquez de dedicar 1,1 millones a la compra de suelo de «tomadura de pelo, cando falamos de nove mil hectáreas e catro mil propietarios». Formoso insistió en que tanto los propietarios que se han movilizado hoy como los concellos están «a favor do parque natural e do PRUX, pero consensuado, igual que en Asturias, Castela e León, Navarra ou Euskadi, para que os propietarios se sintan cómodos, porque as limitacións son evidentes, a maiores das que xa había e que estaban asimiladas».

«A propia Unión Europea destina uns 50 millóns de euros para que se fagan este tipo de políticas, para favorecer a convivencia», abundó. Y reprochó a la Xunta que no haya atendido las alegaciones, en línea con lo manifestado por el regidor de A Capela, Manuel Meizoso: «Levamos comprometidos con isto desde os inicios, deixamos claro que non apoiaríamos o PRUX se non se chegaba a un acordo cos propietarios, e aprobárono sen resolver as alegacións, un paripé, sen consenso nin unhas compensacións dignas». Alberto Cortizas, teniente de alcalde de Monfero, el municipio con más superficie de parque, insistió en que «se se restrinxen os usos e as actividades, hai que dar unha compensación, se non é a compra, unha especie de aluguer do terreo». Y alertó «do cabreo» creciente de los afectados, dispuestos a movilizarse y recurrir a la vía judicial para defender sus derechos.

El alcalde de Pontedeume, Bernardo Fernández, aludió a otro aspecto, por el «colapso» de coches que se produce en el parque y el riesgo para la seguridad, y criticó a la Xunta por no negociar la compra de terrenos en Ombre para habilitar un párking disuasorio. «El día que pase algo los responsables tendrán nombres y apellidos», advirtió.

La protesta de esta mañana generó caos en el tráfico en Pontedeume, puesto que se cortó la circulación en la rotonda del puente de piedra. Policía Local y Guardia Civil alertaron a los participantes de que no disponían de permiso para manifestarse, sino para una reunión.

La Xunta publicó el Plan Reitor de Usos e Xestión (PRUX) de las Fragas do Eume en el Diario Oficial de Galicia el 21 de marzo, el Día Internacional de los Bosques. Ese día, la conselleira de Medio Ambiente. Ángeles Vázquez se desplazó hasta Monfero, donde explicó que su departamento invertirá 1,1 millones de euros en la adquisición de fincas. Explicó que la Xunta «ten localizadas preto de 800 parcelas, cuxa compra se negociará cos propietarios para, unha vez mercadas, realizar actuacións de conservación e restauración de zonas de máximo interese desde o punto de vista ecolóxico, eliminando e retirando especies invasoras e mellorando a continuidade das masas de frondosas autóctonas».