Donaciones de particulares a concellos de Ferrolterra: desde casas a objetos históricos

Elba de la Barrera Agulló
Elba de la Barrera FERROL / LA VOZ

FERROL

La Carta geométrica de Galicia, de Domingo Fontán, fue cedida por Vicente Araguas al Ayuntamiento de Neda.
La Carta geométrica de Galicia, de Domingo Fontán, fue cedida por Vicente Araguas al Ayuntamiento de Neda. JOSE PARDO

Entre el legado de cesiones altruistas destaca el caso de una mujer que cedió en vida sus propiedades a Narón, que posteriormente le brindó ayuda cuando se quedó sin nada

15 mar 2023 . Actualizado a las 22:03 h.

Entre los bienes y el patrimonio de los ayuntamientos del área de Ferrol, Eume y Ortegal existen piezas, inmuebles y documentación que antaño pertenecieron a vecinos y residentes de esas localidades y que, ya fuese en vida o como última voluntad, decidieron aportar su grano de arena para contribuir en la financiación de actividades y servicios municipales o facilitar la puesta en marcha de nuevas infraestructuras y espacios públicos.

Entre ese legado altruista destaca la historia de Guanda Dayli Ramos de Peña, originaria de Uruguay y que durante más de treinta años residió junto a su marido, Juan Peña Montero, en el número 5 de Muíño do Vento, en la parroquia naronesa de San Mateo. Al morir su esposo y carecer de descendientes, la mujer manifestó su deseo de donar sus propiedades al Ayuntamiento de Narón en el año 2004, con el objetivo de que este patrimonio fuese destinado a fines de interés social y cultural y regresar a su país de origen. A cambio, Guanda solo pidió al Concello que le proporcionase un billete de avión que le permitiese retornar a su Uruguay natal.

El lugar de Muíño do Vento en San Mateo fue el lugar de residencia de Guanda y su marido.
El lugar de Muíño do Vento en San Mateo fue el lugar de residencia de Guanda y su marido. JOSE PARDO

El Concello de Narón optó, entonces, por vender la vivienda y destinar el dinero a la financiación de actuaciones de corte social. En total, fuentes autorizadas cifran la cuantía percibida por esta donación en 141.860, 69 euros. No obstante, a su llegada a su país, la benefactora no encontró la red de apoyo que había ido a buscar y decidió retornar a la localidad en la que había pasado buena parte de su vida. Este giro de los acontecimientos motivó que Guanda se convirtiese paradójicamente en la primera beneficiaria de ese fondo de ayuda a las personas desfavorecidas que ella misma había impulsado con su altruismo.

Crónica publicada en el 2004 sobre la donación de las propiedades de Guanda al Ayuntamiento de Narón.
Crónica publicada en el 2004 sobre la donación de las propiedades de Guanda al Ayuntamiento de Narón. La Voz de Galicia

La Administración local se volcó entonces con la octogenaria, sufragando su vuelta a casa, según destacan fuentes municipales. Además, el Concello gestionó el ingreso de Guanda en el centro de mayores Euxa de Narón. Allí pasó sus últimos años de vida, entre el 2005 y el 2008, aunque su legado de generosidad perdura todavía en el tiempo. Y es que sus aportaciones permitieron crear un fondo público, que el Ayuntamiento bautizó con el nombre de la benefactora y con el que se sufragaron distintos gastos derivados del funcionamiento del Centro de Recursos Solidarios de Narón.

Otro caso similar acaeció en Ortigueira en el año 2006. José María Rouco Rouco, originario de la localidad y emigrado a Suiza, fallecía legando sus propiedades a la Administración municipal. Entre los bienes que el vecino decidió poner a disposición de la localidad se encontraban varias fincas rústicas, una vivienda y dinero, tanto en euros como en francos suizos.

Bienes culturales e históricos

Más allá de la cesión altruista de bienes inmuebles o de ahorros de toda una vida, la vecindad de las comarcas también lega a sus ayuntamientos otros enseres de valor como, entre otros muchos elementos, una antigua mesa de picar toxos que terminó en manos del Ayuntamiento de Ortigueira o los manuscritos aportados por vecinos que, destacan desde el Concello de Ares, han permitido recuperar parte de la historia indiana de la localidad y publicar hasta tres facsímiles de obras originales.

Los objetos históricos también forman parte del listado de bienes cedidos por residentes y oriundos en beneficio de sus convecinos. Así, por ejemplo, en el municipio de Neda, el escritor Vicente Araguas, hijo predilecto de la localidad, cedió un ejemplar original de la Carta geométrica de Galicia, elaborada por Domingo Fontán y datada 1845. Así, gracias a esta aportación y a un posterior trabajo de puesta a punto, el mapa se encuentra actualmente en dependencias de la Biblioteca Municipal de la localidad, siendo «unha das contadas institucións galegas que dispoñen desta xoia», según subrayan desde el Concello.

Cedeira, por su parte, cuenta con la extensa colección de objetos que el cronista oficial de la villa, Rafael Usero, fue recopilando durante sus años de investigación sobre la historia del territorio. Desde octubre del 2021, el Concello atesora, entre otros elementos, distintos «machados prehistóricos e ferramentas que se conservan porque a xente lles atribuíu propiedades máxicas».

Así, la generosidad de distintas vecinas y vecinos de las comarcas en las últimas décadas han engrosado el listado de patrimonio, bienes culturales públicos e, incluso, han inyectado fondos para el desarrollo de acciones para el disfrute de los residentes de un territorio con el que sus benefactores se sintieron vinculados de uno u otro modo.

La cesión que convirtió el pazo da Marquesa de San Sadurniño en la casa de todos

Desde el año 2014 el denominado pazo da Marquesa, perteneciente a la nobleza, se convirtió en la sede consistorial de San Sadurniño y actualmente hace la función de casa de todos los vecinos. Pero, tal y como explica el regidor de la localidad, Secundino García, la propiedad de la edificación recaería previamente en la congregación religiosa Hijas de Cristo Rey, que recibió a su vez la titularidad del inmueble de manos de María Natividad Quindós, última marquesa de San Sadurniño, que en esas mismas dependencias departió con el rey Alfonso XIII en 1904 durante una visita del monarca a la comarca.

De este modo, las estancias y pasillos que antaño fueron recorridos por personalidades de alta alcurnia son ahora espacio de intercambio entre la vecindad de la localidad. Y es que en el año 2010, fruto de un acuerdo con la entidad religiosa, el pazo pasó a ser propiedad de la Administración local que sometió el espacio a un proceso de rehabilitación.

Sorpresa notarial

Según rememora el alcalde de San Sadurniño, Secundino García, los representantes de la Administración municipal vivieron un suceso inesperado en sede notarial como fruto del citado acuerdo con la congregación religiosa. Ya que, destaca, además de los bienes inmuebles que fueron a parar a manos del Ayuntamiento, las Hijas de Cristo Rey pusieron a disposición de las arcas públicas dinero que tenían depositado en su cuenta corriente.

«Foi toda unha sorpresa», subraya el alcalde que destaca este cambio de titularidad como uno de los más significativos del municipio.