Una mujer de mediana edad accedió a la tienda de la estación de servicio y sustrajo cerca de 300 euros en efectivo
25 oct 2022 . Actualizado a las 15:37 h.Una mujer de mediana edad sustrajo cerca de 300 euros en efectivo de la caja de la estación de servicio Galp, ubicada en Catabois. Los hechos se produjeron el domingo en torno a las 20.00 horas, cuando la profesional que se encontraba al cargo de las instalaciones salió un momento a despachar combustible en un vehículo. Entonces, según relatan desde la gasolinera, la delincuente, que se encontraba agazapada junto a la entrada, aprovechó para introducirse en el establecimiento. Una vez salvado el primer escollo, la mujer accedió directa a la caja y retiró el dinero en efectivo que había en su interior. Posteriormente emprendió la huida a la carrera, según relata Gustavo Testa, gerente de la estación de servicio.
La situación,que fue puesta en conocimiento de las autoridades que han instado a denunciar, ha quedado registrada a través de las cámaras de seguridad instaladas en las instalaciones de la gasolinera. Algo que, determina Testa, parece no ser suficiente para disuadir a los delincuentes de la comisión de este tipo de actividades delictivas. «Sabía perfectamente que la caja estaba ahí y aprovechó la salida de la trabajadora para entrar en el local y robar la recaudación», expone el responsable.
«Además del disgusto te llevas, te vas para casa pensando en lo que sucederá mañana», detalla la profesional al cargo de la gasolinera en el momento del robo. Actualmente, según explican desde la gerencia del establecimiento, se ha generado un clima de tensión motivado por estos actos. «Son zonas por las que, a partir de una determinada hora, no pasa nadie y eso hace que estemos completamente vendidos», asevera otra de las trabajadoras del establecimiento.
Trabajar con miedo
«Lo peor ya no es la pérdida económica, sino el ver que una persona que lleva veinte años trabajando en el sector tiene miedo», subraya Gustavo sobre el robo perpetrado el domingo. «No se empleó fuerza y está catalogado como hurto, pero hay que pensar en lo que hubiera podido pasar si la persona al cargo hubiera accedido en ese momento al interior de la tienda», determinan desde la gasolinera Galp de Catabois.
Testa acudirá esta misma tarde a dependencias de la Policía Nacional, en Ferrol, para interponer la correspondiente denuncia, según detalla. No es, sin embargo, la primera vez que el responsable de las estaciones de servicio Galp de Catabois y Narón debe hacer frente a un trámite de este tipo en los últimos tiempos, según relata. «Se está convirtiendo en algo habitual para nosotros el tener que denunciar este tipo de situaciones y eso provoca una tensión continuada, que genera cansancio», concluye el gerente de la gasolinera afectada.