
Comienzan los trabajos previos para demoler el viaducto y sustituirlo por una rotonda
23 sep 2022 . Actualizado a las 05:00 h.El futuro bulevar de As Pías comienza a tomar cuerpo. Las máquinas trabajan en ambas márgenes de la avenida. Y es cuestión de días que se produzca un hito que marcará el adiós sin retorno de la vieja carretera: el derribo del puente que conecta Caranza con A Gándara, a la altura de los campos de fútbol. El paso elevado de la calle Marqués de Santa Cruz, que durante décadas compartieron peatones y vehículos, ya está cortado. Las vallas impiden desde el miércoles la circulación desde la rotonda cercana al conservatorio, aunque ayer todavía se permitía el acceso peatonal. Y eran numerosas las personas que recorrían un punto de paso incluido en caminatas diarias y paseos de ida y vuelta con mascota hasta la vecina zona de O Bertón. A partir de ahora tendrán que buscar un itinerario alternativo, porque al corte de tráfico del puente le seguirá su inminente demolición. El enlace del nuevo bulevar urbano se resolverá en este punto con una gran rotonda a nivel. Los trabajos previos están en proceso de arranque. Consisten en el fresado del aglomerado de la carretera, es decir, la retirada de la capa superficial del asfalto. Y según fuentes consultadas, la previsión de obra pasa por que la próxima semana comience el movimiento de tierras, que implica la demolición de la estructura.
El Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, que ejecuta esta tarea, ya había avanzado su intención de proceder este año a la demolición de los muros de la calle Marqués de Santa Cruz. Lo que todavía no se ha aclarado es si, finalmente, ese derribo incluirá o no la parte central del viaducto.
Un ejemplo de ingeniería
Cuando hace más de un año se anunció que se retomaba el proyecto, se destacó el valor arquitectónico de esta estructura, que fue ejemplo de la ingeniería en su época, diseñada por el ya fallecido Carlos Fernández Casado. Y se planteaba no tirarla totalmente, sino mantener la parte central como elemento ornamental dentro de la futura rotonda. Con motivo del inicio de obra, hace casi cuatro meses, personal de la Demarcación de Carreteras en Galicia señaló que esa opción se estudiaría, aunque se desconoce la decisión adoptada finalmente.
Los trabajos van ganando terreno en el primer tramo de los dos en los que se divide la actuación, y ya hay franja excavada a los dos lados. Hacia las Viviendas de Bazán, donde algunos propietarios denunciaron el desbroce de los terrenos y su ocupación para el acopio de material sin autorización, el suelo ya está explanado y los pozos de registro del saneamiento dispuestos, mostrando la cota que tendrá el bulevar cuando esté finalizado. Y en la orilla opuesta, entre O Bertón y la Trinchera, un carril de As Pías se encuentra cerrado al tráfico, delimitado por conos, y con las máquinas operando en el lateral.
Una inversión de 9,1 millones de euros con el horizonte en octubre del 2024
Convertir As Pías en un bulevar requerirá más de dos años y la inversión de 9,1 millones de euros. El macroproyecto urbanístico más importante de las últimas décadas en Ferrol se encuentra en marcha, pero solo parcialmente. El tramo que prevé la supresión del talud, el que discurre entre el monumento de Porta Nova hasta rebasar el entronque con la Trinchera, todavía no está iniciado, aunque su formalización se hizo pública hace más de un mes. Está adjudicada a la unión temporal de empresas formada por Seranco, Terraqua y Civis Global, una ute distinta a la que trabaja actualmente en el siguiente medio kilómetro, que ejecutan F. Gómez y Prace.
El objetivo es que en octubre del 2024 As Pías renazca como un vial urbano flanqueado por un parque lineal con grandes zonas verdes, carril bici, áreas de juegos infantiles y también biosaludables.
Al mismo nivel
La carretera discurrirá al mismo nivel que los barrios que atraviesa, con una gran rotonda de unión con la Trinchera y la de Caranza. Conservará los dos carriles en cada sentido, pero el de la derecha servirá de vía de servicio a las bandas de estacionamiento y paradas de transporte público que se habiliten. Además del puente de Caranza, también se eliminará el paso subterráneo actual y la pasarela peatonal.
El Gobierno central financiará la obra de As Pías con los fondos del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia Next Generation EU. El Ministerio de Transportes sitúa esta actuación como el «kilómetro cero» de la agenda urbana de estos fondos europeos.