El programa está ya en marcha en Valdoviño y Cedeira y antes de fin de año se extenderá a todos los centros de salud de la zona
18 sep 2022 . Actualizado a las 05:00 h.La Consellería de Sanidade puso en marcha en el 2019 un programa piloto de cribado poblacional para la detección del cáncer de cérvix en el distrito centro de Lugo. En mayo de este año 2022 lo extendió al resto del área lucense. Y desde el pasado mes de junio se está implantado también en las áreas sanitarias de Pontevedra y Ferrol. Se trata de un cribado que se realiza a mujeres de 35 a 65 años con el fin de detectar la presencia del virus del papiloma humano (VPH), el principal causante de este tipo de cáncer. Y según resalta Ángel Gómez Amorín, jefe del programa de cribados de Saúde Pública de la Xunta, su puesta en marcha hará posible reducir considerablemente la incidencia y mortalidad de esta enfermedad a medio y largo plazo, ya que el cribado permite detectar lesiones premalignas y tumores en fase precoz.
El programa comenzó su implantación en el área de Ferrol el pasado mes de junio, concretamente en los centros de salud de Valdoviño y Cedeira, donde las matronas ya han recibido formación para llevarlo a cabo y se ha comenzado a enviar las cartas de invitación para participar. Y antes de que acabe el año, según anuncia Gómez Amorín, se irá extendiendo de forma paulatina por el resto de los centros de salud de las tres comarcas.
Al igual que ocurre con los cribados de cáncer de colon y cáncer de mama, las personas de la población diana a la que está dirigido el programa recibirán una carta de invitación en su domicilio. En el área de Ferrol, son algo más de 42.000 las mujeres objeto de la campaña, aunque no se llamará a todas a las vez. «Al tratarse de un cribado que debe realizarse cada cinco años, cada año invitaremos a algo más de 8.000 mujeres, de manera que dentro de cinco años toda la población diana habrá recibido la invitación», explica Gómez Amorín.
Catorce genotipos de riesgo
El cribado consiste en la realización de una prueba para detectar los 14 genotipos de alto riesgo del virus del papiloma humano y las mujeres pueden participar de dos formas: bien recogiendo una muestra de fluido vaginal en su propia casa que luego deberá entregar en el centro de salud (para lo cual el Sergas le enviará un dispositivo de auto toma del tamaño de un tampón) o bien pidiendo cita con su matrona para sea ella quien recoja la muestra.
Si el resultado de esta prueba da positivo, será necesario hacer una citología. Y en el caso de que esta prueba también detecte alguna anomalía, la mujer deberá someterse a una colposcopia para confirmar la presencia de lesiones precursoras o tumores en fase inicial.
Según apunta Ángel Gómez Amorín, de las 6.000 mujeres que ya han participado hasta el momento en este cribado en Galicia, solo el 6% dieron positivo en VPH y se tuvieron que hacer una citología. De ellas, solo se hallaron lesiones en el 14 %. Y de ese 14 % que se sometió a la colposcopia, un 60 % dio negativo, mientras que en el resto de los casos se confirmó la presencia de lesiones cancerígenas o precancerígenas.