Navantia incrementa su cartera de productos con la fabricación de componentes de unión entre las cimentaciones y los aerogeneradores de los parques en alta mar
03 ago 2022 . Actualizado a las 22:51 h.Ocho años después de que Navantia se adentrase —en alianza con Windar Renovables— en el mercado de la eólica marina, la empresa pública ha dado un paso adelante en su posicionamiento en el sector. La fábrica de Turbinas, ubicada en el astillero ferrolano, se incorpora también a este negocio, incorporando a su catálogo productivo la fabricación de bridas de unión entre los aerogeneradores y las cimentaciones que se utilizan para anclarlos al lecho marino.
Según la compañía que preside Ricardo Domínguez, se trata de elementos que cuentan con una gran demanda en el mercado de la eólica marina y, precisamente por ello, son considerados críticos en la cadena de suministro. Los plazos de entrega son exigentes, por lo que el incremento de las capacidades industriales para dar respuesta a los requerimientos del sector constituyen la última apuesta realizada en este sentido por la empresa.
Las bridas de unión tienen alrededor de ocho metros de diámetro medio, y podría incrementarse aún más, debido al aumento constante de la potencia de los aerogeneradores. De ahí que en el caso de las jackets —cimentaciones de tres o cuatro patas— y de los monopiles —de una sola— de gran formato llegan a superar los diez metros.
De acuerdo con los cálculos efectuados por Navantia, «el mecanizado y suministro de bridas para la eólica offshore puede alcanzar un volumen anual de ocupación de 50.000 horas anuales en los próximos años».
La fábrica de Turbinas puede acceder a este mercado debido a su extensa experiencia en la realización de mecanizados de alta complejidad y grandes dimensiones, a través de la producción de engranajes reductores, líneas de ejes, timones y turbinas de vapor, entre otros.
Participación en las F-110
En estos momentos, en la planta ferrolana se están llevando a cabo los mecanizados para los engranajes reductores de la primera F-110.
Además, otra ventaja competitiva que ofrece esta unidad de negocio es que cuenta con medios portátiles —como tornos de grandes dimensiones, mandrinadoras y equipos de equilibrado— con los que puede llevar a cabo mecanizados en las propias instalaciones del cliente, como centrales eléctricas y otras plantas industriales.
«Hacer el mecanizado de las bridas en las instalaciones propias, además de asegurar el plazo de entrega, permite aplicar de forma ágil cualquier cambio en el diseño y realizar los ajustes finales», subrayan fuentes de la empresa pública.
Energías Verdes
La fábrica de Turbinas se encuentra enmarcada en Navantia Seanergies, la división de Energías Verdes de la compañía, a la que también está adscrita el astillero de Fene, volcado desde hace ocho años en la construcción de cimentaciones para los parques de eólica marina.
La empresa pública se ha convertido en una referencia en la fabricación de cimentaciones, tanto fijas como flotantes, y en estos momentos está acometiendo una inversión de 36 millones de euros para la adaptación de las instalaciones de la antigua Astano para la producción de monopiles XXL. Ya cuenta con un acuerdo marco para la construcción de 130 estructuras de este tipo a partir del próximo año para Iberdrola, y recientemente acaba de firmar un contrato con Ocean Winds para el suministro de 14 estructuras para el parque escocés de Moray West, que arrancará a finales de año.
Una factoría que se estrenará el año próximo en el sector del hidrógeno
La fábrica de Turbinas no solo se adentrará en el mercado de la eólica marina, sino que, a partir del próximo año, también se adentrará en la producción de componentes para la industria del hidrógeno. Hace tan solo unas semanas que firmó un acuerdo de colaboración con Repsol para la fabricación de los electrolizadores para las plantas de la compañía.
La compañía energética prevé lanzar inversiones por valor de 2.500 millones de euros hasta el 2030, por lo que la nueva línea de Turbinas contará con el respaldo de nuevos encargos.
La planta ferrolana también desarrollará componentes para los electrolizadores de la planta de hidrógeno que proyectan Reganosa y EDP Renovables en As Pontes. El socio tecnológico de estas firmas, Siemens, ha elegido a la factoría de la antigua Bazán como emplazamiento para la fabricación de los elementos imprescindibles en el proceso de producción de hidrógeno.