Además de las pruebas técnicas y contrataciones de personal que vienen haciendo en Navantia, se está produciendo en la ciudad un movimiento en los alquileres y nuevos empleos, especialmente en hostelería, con gente joven. Pero el astillero, para alcanzar su esplendor, tiene una deuda de carácter urbanístico con la ciudad, deberá armonizar la entrada principal, demoliendo un pedazo de muro-parche, frente a la capilla de las Angustias, (siglo XVIII) que, conmovida por lo que hay delante, tiene una discrepancia respetuosa, porque le priva de ver el paisaje que está detrás del muro. Ahora, con el florecimiento que se va produciendo en el astillero, y la cirugía estética urbana que está emperifollando la ciudad, Navantia no debe quedar atrás.
Los partidos políticos presentes en la corporación ferrolana han gobernado la ciudad, y Xaime Bello, es un nacionalista, químicamente puro, fue alcalde, con notable alto, que colocó en idioma gallego el nombre de todas las calles de la ciudad, adquirió el Castillo de San Felipe y fue primero en solicitar, Ferrol Patrimonio de la Humanidad. Intentó comprar el edificio del antiguo Gobierno Militar. De todo ello, de lo divino y de lo humano, hablamos con Xaime, y nos demostró ser más que un profesor, más que un líder nacionalista, más que el alcalde que ordenó retirar la estatua de Franco de la plaza de España. Con su humor de país, favoreció siempre la sonrisa de la amistad, difícil en los tiempos que corren, pues la amistad entre los políticos, a veces está escondida detrás de la mentira. No es nuestro caso, aunque somos de persuasión política diferente.
Se acaba de celebrar en Ferrol la Semana de las Fuerzas Armadas, que cada año abren las puertas de los departamentos militares para que el público en general conozca las instalaciones y las herramientas de que disponen hombres y mujeres, para tomar decisiones azarosas en beneficio de la paz. En Ferrol, el destacamento militar es naval, y está en el Arsenal, en la Graña, en el Cuartel de Dolores, en la Escuela de Caranza, y en los buques de la Armada, que la gente pudo visitar y ver el despegue epopéyico de nuestras Fuerzas Armadas, y luego el Museo Naval, donde se vive la raíz propia de la identidad histórica de la Armada, con hechos y actos comprobables, y la mundialmente conocida bahía ferrolana, escenario único, con los marinos como protagonistas. De todo ello sorprende la abundancia de libros, planos y maquetas que tratan los temas navales en el renombrado Museo, dándole expresión y un análisis racional a todo lo relacionado con el mar.