Olalla Figueroa, dermatóloga del CHUF: «A veces los tatuajes camuflan lunares que son melanomas»

Olalla Figueroa Silva (A Coruña, 1986) es dermatóloga en el Complejo Hospitalario de Ferrol (CHUF) y reconoce que por su consulta del Hospital Naval siguen llegando personas que no han sabido cómo protegerse del sol. «No solo hay que hacerlo en la playa o la piscina, también cuando se hace deporte al aire libre, cuando se trabaja al sol y sobre todo no se puede exponer a los niños menores de dos años, incluso aunque lleven protector», resume una especialista con motivo del Día de Melanoma, uno de los cánceres más agresivos, en especial, si no se detectan a tiempo. En el área descubren una media de 60 casos al año.

-Para detener el avance del melanoma es fundamental un diagnóstico temprano, ¿temen que se hayan retrasado en la pandemia en el área?

-Es cierto que durante el confinamiento hubo un tiempo de cierre de consultas, pero se retomaron pronto y siempre hubo medidas alternativas para que tanto los médicos de Atención Primaria nos derivasen a los pacientes con lunares o lesiones que podían ser graves. Y precisamente porque en los ambulatorios estaban centrados en el covid creamos un correo electrónico corporativo para que los pacientes enviasen fotos de las zonas de la piel donde creían que podían tener una lesión maligna.

-La vigilancia de los lunares es fundamental, pero también complicada en algunos casos...

-Eso es cierto, pero en el área sanitaria tenemos dos armas buenísimas: la primera la teledermatología, es decir, las consultas que nos mandan desde los centros de salud, que son esenciales, porque el melanoma crece muy rápido y en dos o tres semanas puede cambiar el diagnóstico. Cuando detectamos uno, al día siguiente se retira y comienza el tratamiento. La otra arma que tenemos en el área de Ferrol, y de la que no disponen en todas las ciudades de Galicia, es la dermatoscopia digital que funciona fotografiando todas las partes del cuerpo de paciente y después nosotros analizamos lunar por lunar, lesión por lesión, es como crear un mapa del cuerpo de una persona y cuando se revisa se pueden localizar rápidamente si alguno es un melanoma. Con esta técnica tratamos a unas 220 personas y hemos detectado muchos cánceres en una fase muy inicial con lo que así tenían un buen pronóstico, es una gran tranquilidad para el paciente y para nosotros.

-¿Qué personas pueden acceder a esta prueba?

-Pacientes de riesgo o que ya hayan sufrido un melanoma, esta técnica está en el hospital de Ferrol desde el año 2017.

-Y el resto de la población...

-Es muy importante cambiar el mensaje de que estar moreno es estar bien, el bronceado nunca es saludable, a veces puede crear lesiones cancerígenas y en todos los casos provoca un envejecimiento de la piel. Yo siempre les recuerdo a mis pacientes que tengan en mente cómo está la piel de su cara y la de sus nalgas, que han estado a salvo del sol. Para prevenir el melanoma yo recomiendo reconocer y conocer nuestro cuerpo: usar reglas como la regla ABCDE en la que cada letra implica una característica sospechosa: A de asimetría, B de borde, porque la mayoría de los melanomas iniciales tienen bordes irregulares o borrosos; C de color, que en el caso de los melanomas no es homogéneo; D de diámetro (si es mayor de 6 milímetros) y E de evolución, si con el tiempo ha cambiado su tamaño o la conocida como patito feo. Y usar siempre no solo protección, sino también sombreros o sombrillas que creen sombra.

-¿Los tatuajes son peligrosos?

-A veces los tatuajes camuflan lesiones que son melanomas, claro, y a mi consulta llegan las personas que han tenido problemas con ellos, los más frecuentes son las infecciones, pero también surgen alergias a las tintas, en especial a la roja. Mi consejo es que si hay que hacerse un tatuaje mejor que sea siempre en negro.

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