El conflicto se agrava al impedir la entrada de los servicios mínimos a las plantas de Endesa
FERROL
Los transportistas del carbón prosiguen con las protestas
08 mar 2021 . Actualizado a las 23:48 h.Los transportistas del carbón de As Pontes continúan con las protestas, secundadas por el personal de las auxiliares de Endesa y por el comité de empresa, y respaldadas por las asociaciones de empresarios locales. El conflicto se agudiza, después de que ayer se impidiera la entrada del personal de servicios mínimos a las plantas. Los camiones cortaron el acceso a la fábrica y a la central de ciclo combinado, entre un fuerte despliegue de Guardia Civil, además de la Policía Local.
«Que quede claro que non só estamos os camioneiros», remarcó Manuel Bouza, portavoz del colectivo. «O Concello é a única Administración que sempre nos apoiou. Imaxino que a Xunta de Galicia e o Ministerio de Transición Ecolóxica, e tamén Endesa, terán algo que dicir sobre isto. E se teñen que adiantar a reunión da comisión de seguimento [prevista para el viernes], que a adianten», abundó Bouza. Mientras, advirtió: «Non nos imos mover, estamos dispostos a falar e a negociar, que digan e que firmen cousas. E non nos importa que se queixen por ter que cerrar a central de gas [por el bloqueo de ayer, que impidió el acceso del relevo], porque, cantos camións levan parados vinte meses? Pois 150. E varios en situación de posible embargo».
Sin embargo, el no respetar los servicios mínimos supuso que el personal de turno tuviese que asumir el de sus compañeros, y permanecer en las instalaciones pese a haber terminado su jornada.
Los trabajadores de las auxiliares llevan 25 días de encierro permanente en la fábrica, al finalizar su jornada laboral. «Quieren garantías de empleo y de futuro, un compromiso de Endesa de que haya recolocaciones si se produce un desmantelamiento total o parcial de la central, que tengan prioridad», remarcó José Hurtado, responsable de política sindical de Industria de CC. OO.
Para Marcos Prieto, miembro del comité de empresa de Endesa y responsable de Industria de UGT, «la situación es insostenible, todo son incertidumbres y nadie sabe nada [sobre el porvenir de la central y el empleo]».