Largas listas de espera y notas de corte más altas en los ciclos de FP ferrolanos

PABLO J. RAÑALES / A.U. FERROL / LA VOZ

FERROL

La alta demanda se mezcla con los problemas de gestión del coronavirus en espacios como aulas talleres
La alta demanda se mezcla con los problemas de gestión del coronavirus en espacios como aulas talleres JOSE PARDO

La demanda de Formación Profesional también asciende este año, pero marcada por el aumento general de las notas de los estudiantes

26 jul 2020 . Actualizado a las 05:00 h.

Los centros de formación profesional viven, tras la publicación de la lista provisional de adjudicaciones de plazas por parte de la Xunta de Galicia, los principales efectos en materia educativa del covid-19. El sistema de oferta y demanda se ve influenciado en la actualidad por las notas altas que han obtenido los estudiantes, tanto en las plazas adjudicadas, pendientes de formalizar la matrícula, como en las listas de espera. Las listas son precisamente un indicador cercano a la demanda y a las características del acceso a la formación superior. De momento, también en ellas se pueden encontrar buenas calificaciones y, además, gran extensión.

«Hai moitísima demanda e a xente parece estar volcándose na FP», detalla Ana Roel, directora del IES Leixa. El instituto tiene uno de los veinte ciclos con mayor nota de corte de Galicia, Laboratorio Clínico y Biomédico, con un 7,19. Es decir, que el último alumno procedente de bachiller al que se le ha adjudicado una plaza alcanzó esa nota en el sistema de acceso a la universidad.

Es precisamente en la rama sanitaria donde Roel percibe un cierto auge de los ciclos, ligados a las posibilidades laborales en hospitales y residencias y a las expectativas que se ofrecen a medio plazo por el contexto sanitario. Ana Roel también coincide con Fernando López, director del Rodolfo Ucha, en la idea de que la mayor demanda de este año se suma a una tendencia creciente de la Formación Profesional. «Excepto en dos ciclos, tenemos todo adjudicado, a espera de que se hagan los procesos de matrícula», declara Fernando López, que recuerda que las notas de corte de otros años ya no sirven como orientación por las medidas adoptadas en el ámbito educativo. Desde la dirección del CIPF Ferrolterra, Enrique Pazos atribuye la gran demanda actual de julio al mayor número de aprobados. «Tendremos menos flujo y menos movimiento de plazas para FP en septiembre», explica.

El Centro de Formación Profesional Rodolfo Ucha, en foto de archivo
El Centro de Formación Profesional Rodolfo Ucha, en foto de archivo José Pardo

En general, en Ferrolterra está repercutiendo la dinámica del resto de Galicia. Mientras que en septiembre de 2019 había seis ciclos en toda Galicia que exigían un notable para entrar, ahora pasan a 22 los que tienen al menos un 7 de nota de corte. La panorámica será fija y estable ya la próxima semana, una vez estén las matrículas formalizadas.

En cuanto a los problemas derivados del covid-19, los distintos centros de la zona se lanzan a acondicionar los espacios disponibles y a reorganizar las aulas-taller de los ciclos de Formación Profesional. Son precisamente este tipo de aulas, con una organización concreta y materiales específicos, desde maquinaria a herramientas o bancos de trabajo, donde es más difícil implantar las medidas de seguridad e higiene. Victoria Piñeiro Carragado, directora del IES Saturnino Montojo, defiende que es necesario, ante todo, un refuerzo de personal o más recursos económicos; Enrique Pazos, del CIPF Ferrolterra, pide medidas más específicas y adaptadas para FP, ESO y bachillerato.

La necesidad de actualizar currículos

Tanto el director del Rodolfo Ucha, Fernando López, como el del CIPF Ferrolterra, Enrique Pazos, recalcan la necesidad de actualizar y revisar la programación académica de los centros para estar lo más cerca posible del sector empresarial. «Las empresas avanzan muy rápido y los ciclos deben ir de la mano», argumenta López. El contacto entre los centros y los tutores de prácticas se vuelve fundamental a la hora de diseñar una oferta educativa adaptada a la realidad laboral; sin una configuración de los programas ajustada a la situación de las compañías, la calidad de los títulos se reduce.

Para el director del CIPF Ferrolterra, existe una mejora de la integración de las empresas en la planificación de los ciclos y sus currículos, sobre todo con las FP duales, que obligan a los profesores a actualizarse constantemente ante los cambios dentro de las empresas. En este sentido, la relación entre ambas entidades es más cercana y un elemento diferenciador respecto a otras titulaciones. Pazos expone que hasta se dan situaciones en donde las empresas demandan más estudiantes de los que hay en los centros de formación, como sucede en el ciclo medio de Telecomunicaciones y en el de Mantenimiento de estructuras de madera y mobiliario de embarcaciones de recreo.

Ana Roel, directora del IES Leixa, defiende que también es fundamental mejorar y «potenciar toda a zona norte en termos de ciclos de Formación Profesional, porque precisamente ano tras ano ten máis demanda», tanto por los estudiantes como por las empresas locales.