La Álvaro de Bazán será el buque de mando de una flota de la OTAN

Manuel Arroyo Alves
Manuel Arroyo FERROL / LA VOZ

FERROL

ÁNGEL MANSO

La fragata con base en el Arsenal de Ferrol permanecerá desplegada con la Alianza desde julio hasta noviembre

09 jun 2020 . Actualizado a las 05:00 h.

La serie de fragatas F-100 volverá a abanderar una de las flotas permanentes de la OTAN en los próximos meses. Será a través de la primera de las cinco unidades construidas en Ferrol, la Álvaro de Bazán (F-101) y que forma parte de la 31ª. Escuadrilla, con base en el Arsenal Militar ferrolano.

Según fuentes consultadas en la Armada, la fragata que da nombre a la clase tiene prevista su integración como buque de mando en la Agrupación Naval Permanente de la OTAN número 2 (SNMG-2 por sus siglas en inglés), desde el mes de julio hasta noviembre. Dará así relevo al actual buque insignia, la fragata italiana Virginio Fasan en aguas del Mediterráneo. Para ello, la F-101 se sometió el pasado mes de enero, en aguas de Cádiz, a las pruebas de calificación de cara a la obtención de la certificación operativa con la que se inicia el nuevo ciclo de actividad del buque.

Las F-100 se integran con periodicidad en este tipo despliegues de la Alianza. De hecho, su función multipropósito y su armamento -sistema de combate AEGIS y radar multifunción SPY-1D- las optimizan para actuar como buque de mando y control en escenarios de conflicto, integradas en una flota aliada de respuesta rápida.

En activo

La fragata Cristóbal Colón (F-105), la más moderna de la serie, ultima estos días su preparación para afrontar la calificación operativa en el golfo de Cádiz durante el mes de julio.

Otra de las unidades de la 31ª. Escuadrilla, el buque de aprovisionamiento en combate Cantabria (A-15) continúa transferido a la cadena operativa de las Fuerzas Armadas, en el marco de la operación Balmis de lucha contra la propagación de la pandemia del coronavirus.

El resto de los barcos continúan amarrados a puerto mientras retoman las actividades de adiestramiento individual y básico, además de las necesarias tareas de mantenimiento.

En todos los buques se mantienen «protocolos estrictos» de seguridad, prevención y distanciamiento social para preservar la salud del personal de la Armada.

Otras unidades

En el ámbito de la Fuerza de Acción Marítima (MARFER), los patrulleros siguen realizando sus misiones de vigilancia de los espacios marítimos de soberanía española, a los que la semana pasada se unieron el Serviola (P-71) y el Arnomendi (P-63) en sus respectivos despliegues de control. Por su parte, la Unidad de Buceo de Ferrol continúa entrenando para mantener el nivel de alistamiento óptimo para poder ser activado en caso necesario.