Luis Ángel de las Heras: «La atención se amplía ahora a personas que viven solas y pueden necesitar ayuda»
FERROL
Todas las diócesis tienen su propia organización de Cáritas, adaptada a la realidad de cada territorio y firmemente arraigada a través de las parroquias. Y actúan con total autonomía. Pero, aun así, los prelados gallegos han designado a uno de ellos como encargado de impulsar y seguir, con especial cercanía, la labor que lleva a cabo Cáritas en toda Galicia. Es el obispo de Mondoñedo-Ferrol, Luis Ángel de las Heras.
«Todas las Cáritas diocesanas de las diócesis gallegas están comprometidas con los más vulnerables de la sociedad en estos momentos, como en todos los momentos», dice el obispo De las Heras. «Los trabajadores continúan su labor en teletrabajo, en oficina o en tareas directas con usuarios de programas. La coordinación en el escenario del coronavirus -añade el prelado- ayuda a responder a los retos que surgen».
«Hay un seguimiento y un apoyo continuado y de refuerzo a las Cáritas de las parroquias, de las unidades pastorales o de los arciprestazgos -recalca Luis Ángel de las Heras-. Siempre hay teléfonos para emergencias».
Un nuevo escenario
El obispo De las Heras subraya que en el nuevo escenario nacido de la declaración de estado de alarma es necesario respetar las disposiciones de las autoridades en materia sanitaria, pero insiste en que eso no impide que la acción de Cáritas siga llegando hasta donde hay alguien que precisa ayuda.
«Toda persona que necesita algo de Cáritas -resalta el obispo-, es atendida. En los barrios y parroquias, la atención de Cáritas se amplía ahora a personas que viven solas y pueden necesitar una ayuda extra en estos momentos. Hay voluntarios y trabajadores que hablan por teléfono con frecuencia con personas ancianas que viven solas».
El obispo De las Heras explica que «las mayores dificultades que encuentran», en estos momentos, «los trabajadores y voluntarios de Cáritas» están «en la atención y el acompañamiento a familias migrantes y personas sin hogar», y sobre todo a las personas que padecen «alguna enfermedad psiquiátrica o adicción».
Desgracias
De las Heras anota, asimismo, que «todas las desgracias que suceden a las personas de este mundo afectan más a los que ya padecen alguna, como ocurre en muchos casos con esta enfermedad epidémica. Cáritas tiene el compromiso ineludible de ayudar a controlar la pandemia, al mismo tiempo que sigue atendiendo a toda persona vulnerable que necesita ayuda. Hacemos -dice el obispo- lo que tenemos que hacer».