Tapiadas las casas que algunas personas usaban para pernoctar de forma irregular
25 mar 2022 . Actualizado a las 16:36 h.Cerrojazo a la okupación en el parque urbano del Montón. El Concello de Ferrol ha clausurado las puertas a la presencia de inquilinos indeseados en su interior. Y lo ha hecho de forma literal: tapiando con ladrillos los accesos y ventanas de las pequeñas casas existentes en el recinto, utilizadas desde hace varios años y a temporadas por distintas personas. Se garantiza así que no volverán a ser utilizados para ese fin, después de las continuas protestas de la asociación de vecinos, que venía reclamando desde hace tiempo una solución a esta situación. El alcalde había trasladado su compromiso a la entidad de que se tapiaría de forma inmediata los inmuebles y esta semana se ha cumplido.
La medida llega unas semanas después de que el juzgado avalase la demanda de desahucio presentada por el Ayuntamiento contra dos de las personas que residían ilegalmente en este espacio.
Desahucio
El fallo considera procedente el desahucio por precario y condenaba a los demandados a dejar libre la finca, y advirtiendo de que, de no hacerlo en el plazo legal, se procedería al lanzamiento. Los demandados se encontraban en situación procesal de rebeldía y en paradero desconocido, por lo que la resolución judicial fue publicada en el Boletín Oficial de la Provincia a principios de este mes. Y hace unas semanas que en el recinto no se apreciaban ya indicios de que hubiese nadie residiendo en esas casas.
Lo cierto es que hasta el tapiado de esas propiedades nada impedía la pernocta de personas. De hecho, el acceso sigue expedito. La verja del perímetro continúa rota en distintos puntos. Y todavía no se han repuesto los dos portalones metálicos que marcaban los dos puntos de entrada al parque, robados hace más de año y medio. Y permite la entrada de los paseantes, aún sin estar abierto oficialmente para el uso público. El deterioro se extiende también por un recinto en el que la falta de control favorece el avance del deterioro, donde en un breve paseo pueden verse residuos apilados, un árbol caído o un cartel con información del parque tirado.