Fomento reparó el cierre hace dos meses y vuelve estar abierto a la calzada
18 nov 2019 . Actualizado a las 05:00 h.Poco más de dos meses han durado los trabajos realizados en los cierres que rodean el Acceso Norte. Otra vez están sin vallar los senderos que discurren a unos metros de una cazada por la que los vehículos incrementan la velocidad para entrar en la AP-9. Si en septiembre la maleza y el tiempo había desgastado las mallas del cierre y había grandes huecos, la situación es ahora peor, porque hay tramos grandes sin ninguna protección.
Desde el Ministerio de Fomento, encargado de este mantenimiento, aseguran que cada vez que reponen el cierre se producen robos o actos vandálicos en el mismo. En septiembre se realizaron trabamos en este mismo punto, donde ahora solo quedan los postes desnudos, sin rastro de la malla protectora que los técnicos sospechan que se roba poco después de cada reparación.
La mayor parte de los usuarios de estos caminos son personas que pasean por la zona y que denuncian que la falta de protección no impide que animales sueltos o salvajes se cuelen en la calzada y puedan provocar un accidente. Asimismo, se quejan del mal estado del firme. No obstante, desde Fomento recuerdan que el «mantenimiento de las sendas peatonales no lo realiza el Ministerio de Fomento, al no tratarse de un elemento funcional de la carretera».
Además de estas dos sendas, que miden en torno a un kilómetro, Fomento incluyó en esta red de vías otra que discurre entre el barrio de Canido hacia A Malata. Un atajo hacia el complejo deportivo que usan muchos vecinos y que necesita mejoras, sobre todo desde las pasadas lluvias, que han incrementado sus baches y los charcos.