Sin planes para el hueco previsto para el centro deportivo que consumió 5,5 millones de euros
FERROL
Si nada está previsto para remodelar un túnel con carencias evidentes, menos aún hay intención de meter mano a un espacio más polémico. La remodelación de la plaza de España contemplaba la creación de un centro deportivo y de ocio, que incluía un spa con una piscina semiolímpica. Pero el proyecto quedó paralizado bajo el mandato de Vicente Irisarri, cuando Ángel Mato era entonces su concejal de Urbanismo. La oposición tumbó en marzo del 2010 la adjudicación de las obras emprendidas, denunciando la ocultación de informes. Y todo quedó ahí. El aspecto que muestra en la actualidad es el mismo que el que presentaba en 2007, cuando el bipartito PSOE-IU decidió paralizar las obras de construcción del edificio de 21 metros de altura proyectado en el mandato anterior, bajo el gobierno de PP e IF. Y hasta entonces, en la obra civil se habían invertido ya 5,5 millones de euros, una cantidad que yace enterrada en forma de paredes, columnas y dos pisos de suelo de hormigón. Y el gran vaso de una piscina de 12 por 25 metros que solo sirve para acumular el agua que filtra la lluvia desde la superficie.
Al interior del sótano de la plaza de España ya nadie accede. Solo lo hacen los bomberos, cuando las bombas colocadas se estropean y deben acudir para achicar el agua que anega su interior. El actual regidor descarta intervenir en este mandato para recuperar este espacio. Tampoco se hizo en el anterior, pese a que su antecesor, Jorge Suárez, abogó en febrero del 2016 por darle uso al subsuelo, abriendo «un debate de goberno profundo para darlle sentido a ese espacio».