Luis César encabeza el ránking de técnicos con más partidos oficiales, seguido por José López y Juan Veiga
02 oct 2019 . Actualizado a las 05:00 h.Doce temporadas seguidas como guardameta de la portería racinguista y cuatro cómo técnico. La trayectoria de Luis César está íntimamente ligada a la del Racing de Ferrol. Tiene el récord de mayor número de partidos oficiales al frente de la plantilla del club verde y con él se vivió una época dorada.
Llegó al banquillo en el 2000, al poco de anunciar su retirada, gracias a un gran vidente Isidro Silveira, que le colocó al frente del grupo de futbolistas que poco antes habían sido sus compañeros. Cogió a un Racing en pleno apogeo recién ascendido a Segunda, y terminó el año 16º. «Se retiró como portero y en ese momento Silveira le ofreció afrontar la responsabilidad de entrenar el equipo. Debutó directamente en la categoría de plata, fue impresionante. Una apuesta muy arriesgada en su momento pero que yo creo que dio buen resultado», describe el historiador del club, Jorge Deza.
Quizás, su segundo año fue el más exitoso, al terminar el equipo noveno. Pero también vivió la cara más amarga del fútbol en su tercer ejercicio, con el descenso tras perder ante el Tenerife en A Malata en la última jornada. «La siguiente temporada consiguió ascender de nuevo al equipo. «Sacó bastante partido a la gran movilidad que hubo en la plantilla. En aquellos años se conocía al Racing como la ONU futbolística porque había jugadores de todos los continentes. Yo sobre todo destacaría su segunda temporada, hizo un trabajo defensivo muy bueno», recuerda el historiador.
En los difíciles años ochenta
La segunda plaza de este ránking la ocupa José López, también primero jugador de la casa en, los años sesenta, antes de asumir el banquillo. «Empezó en el año 78 en Segunda División, pero tuvo mala suerte. Fue cesado muy pronto en una temporada malísima en la que el Racing tuvo varios entrenadores. No volvió ya hasta los ochenta. Le tocó una época muy complicada económicamente, no se podía fichar mucho y tuvo que tirar de cantera», recuerda el historiador.
El extécnico destaca de su trayectoria dos momentos, el empate a dos frente al Deportivo y el paso por la categoría de plata. «El mejor momento que viví fue cuando empecé en Segunda División, lo que pasa es que, como siempre en el Racing, el problema era el económico para hacer una plantilla competente», apunta.
Último ascenso a Segunda
Juan Veiga ocupa el tercer peldaño de este podio y puede presumir de haber dirigido al equipo que consiguió el último ascenso a Segunda División. Fue una tarde de gloria en el estadio Rico Pérez de Alicante, tras haber encarrilado la eliminatoria con un 0 a 2 previo en A Malata. «Isidro me dio la oportunidad de pasar de entrenar a nivel aficionado a profesional. Estaba con el Val en Preferente, habíamos ganado la Liga y ascendido contra todo pronóstico, y de sorpresa, Isidro, que venía mucho al equipo porque su hijo Chino jugaba en el Val, me ofreció el banquillo», recuerda. Supuso un «cambio muy grande» y «un sueño». «Tengo recuerdos fantásticos del primer año, los derbis contra el Celta, la goleada 1 a 6 al Almería, récord aún histórico de goleada del Racing a domicilio en Segunda...», rememora.
Veiga destacó también por tener buen ojo en la cantera. «Con nosotros debutó en el fútbol profesional Álex López, que era juvenil, creo que fue contra el Tenerife en A Malata. De los jugadores que hay hoy en día, también tuvieron minutos con nosotros Marcos Álvarez y Pablo Rey, superviviente de ese ascenso, destaca. El técnico de Mugardos también convocó a Diego Rivas para un partido en Segunda. No se olvida del hito de Mario Bermejo bajo su batuta: consiguió el primer pichichi para el Racing en Segunda con 26 goles. Deza destaca su predilección por el Racing. «Tuvo oportunidades, pero cuando no entrenó al Racing no entrenó a nadie más».