La Casa do Mel trabaja para recuperar la abeja autóctona

MARÍA MEIZOSO AS PONTES / LA VOZ

FERROL

CEDIDA

Arrancó ya la primera de las cinco jornadas de cría

03 jul 2019 . Actualizado a las 05:00 h.

La Casa do Mel de Goente dio ayer el pistoletazo de salida a cinco jornadas en las que un grupo de apicultores -casi todos socios de la entidad- participarán en un curso de cría de abeja reina. «É unha parte do programa que estamos facendo de selección das mellores abellas. Buscamos que non sexan agresivas, que non lles ataque moito a varroa -un ácaro- e a poder ser que sexan produtivas», explica el presidente de la asociación, Manuel Ferreira.

Así, recuperar la variedad de la abeja local es el fin último de un proyecto innovador para el que la Casa do Mel cuenta con el respaldo tanto de la Diputación -a través de una subvención- como de Endesa. En ese sentido, destaca Ferreira, «hai unha colaboración moi boa da empresa desde o principio. De feito, o colmenar onde facemos as prácticas é deles. E tamén nos adaptaron todo para colocar unha estación de fecundación».

En el curso, que culminará el próximo día 15, los asistentes realizarán la parte práctica en la zona de la Escombrera y la teórica en la instalaciones de la entidad en la parroquia de Goente. En esta primera fase, resume Ferreira, «buscamos unha abella mansa e, a ser posible, que non sexa enxameadora». Esto es así, añade, porque «o enxame cando sae da colmea leva parte do mel e estraga a produción». Por ello, «unha colmea que non teña tendencia a iso sería a ideal».

Colmenas en la Escombrera

La colocación de diferentes colmenas en la zona de la Escombrera de Endesa responde a una necesidad de «conseguir certas condición porque precisamos que as abellas que seleccionamos non se contaminen co resto». En este momento, la Casa do Mel ya tiene «machos separados». Una vez concluya el presente curso, «levaremos ata a estación de fecundación as que se reproduzan estes días». Pero ahí no todavía no acabará el proceso. El proyecto, que arrancó el año pasado, continuará de la mano de la Universidad de Murcia. En concreto, detalla del presidente de la Casa do Mel, «firmamos un convenio con esta institución para que, despois de que se reproduzan as abellas, envialas a analizar alí para que eles determinan a calidade que ten esta variedade do país».

Si se cumplen las previsiones, el programa empezará a arrojar resultados en un plazo estimado de cinco años.