El ábside de la iglesia de Santa Mariña seguirá en pie en memoria del templo

Ramón Loureiro Calvo
Ramón Loureiro FERROL / LA VOZ

FERROL

JOSE PARDO

El monumental mosaico de Segura Torrella ha podido salvarse, pero el de González Collado se ha perdido

10 jun 2019 . Actualizado a las 05:00 h.

Sí, así es: finalmente acabó sucediendo lo que ya se anunciaba como inevitable. La paradójicamente llamada a Igrexa Nova de Santa Mariña, la que se alzó a mediados del siglo pasado con materiales que acabarían dando problemas en construcciones de todo el país, ya no existe. Tras años cerrada al culto por razones de seguridad, a la Diócesis de Mondoñedo-Ferrol no le ha quedado, finalmente, otra solución que demolerla. Quedará en pie, eso sí, a manera de testimonio, una pequeña parte del edificio, en la que por cierto ha logrado sobrevivir a la piqueta el monumental mosaico de Ricardo Segura Torrella. Pero el segundo mosaico, el de González Collado, se ha perdido para siempre, porque el mal estado de la pared que sostenía ha hecho imposible, incluso (como estos mismos días recalcaban fuentes del Obispado), intentar retirarlo.

Y lo cierto es que, con la pérdida de este templo, no solo desaparece una iglesia diocesana. sino que desaparece también, en realidad, una parte muy importante -o un escenario muy importante, si se prefiere decirlo de esa otra manera- de la historia reciente de Galicia. Porque la Igrexa Nova de Santa Mariña tuvo un lugar muy relevante tanto en la renovación eclesial gallega como en la lucha por las libertades democráticas. Y el caso es que, como confirmaban ayer mismo, desde el Obispado, se llegó a temer que ni siquiera el ábside del templo, que es lo que está previsto conservar, pudiese sobrevivir: «Temíamos -señalan- que, tras la demolición de la nave de la iglesia, los técnicos se encontrasen con que finalmente ni siquiera fuese posible consolidar la parte que se quiere preservar como testimonio, pero de momento parece que todo va bien, y que no va a haber problemas para que esa parte de la construcción, con el mural de Segura en su interior, permanezca en pie».

Protección

La Diócesis de Mondoñedo-Ferrol estudia ahora cuál será la solución arquitectónica (y estética) más viable para la preservación del ábside. «Por supuesto estará abierto -señalan, también, desde el Obispado-, pero se tomarán medidas para mantenerlo a salvo de posibles actos vandálicos. En principio, la idea podría pasar por colocar una verja que permita ver el mosaico, sobre el que se colocará una nueva cubierta para protegerlo».