José Ferreras: «Escaneamos la boca y en 30 segundos llega al laboratorio el molde más preciso»

Bea Abelairas
Bea Abelairas FERROL

FERROL

CESAR TOIMIL

La clínica Ferreras cuenta con la tecnología más avanzada para digitalizar todos los procesos de forma que elimina cualquier margen de error en intervenciones o piezas

28 abr 2019 . Actualizado a las 05:00 h.

Los profesionales de la Clínica Ferreras están en continua formación. José Ferreras, el propietario, el primero. «Estudiamos mucho y viajamos a muchos congresos, acabo de empaparme en un nuevo programa para planificar intervenciones», cuenta antes de mostrar una pantalla con imágenes en tres dimensiones de uno de los pacientes a los que ha liberado de una deformidad en la mandíbula. Todo queda registrado al milímetro gracias a su sistema, completamente digital.

-¿Han cambiado mucho los tratamientos?

-La digitalización está en todos los procesos y la ventaja es que eliminamos cualquier error humano en las tomas de moldes, las contracciones de los materiales, porque al final se escanea y si no se hace bien la máquina lo va a detectar y siempre se puede repetir el proceso. Es que a veces no da tiempo ni a que el paciente se marche, cuando antes había que pedirle que regresase otro día para tomar una medida. Ahora mismo escaneamos la boca y en 30 segundos llega al laboratorio el molde más preciso. Y se transmite al centro que quieras: Madrid, Barcelona o Suecia, donde ya hemos encargado algunos implantes.

-¿Es más cómodo?

-Desde luego, no se radia y no molesta en absoluto. Ganamos en precisión. Donde más se usa es en rehabilitaciones con implantes o para las prótesis fijas de toda la vida. Este sistema también permite que los pacientes vean el resultado, ya que se hace un modelo en tres dimensiones con el mismo tamaño que las piezas que se van a colocar y esto es algo que permite adelantar problemas.

-¿Por qué?

-Hay casos complejos en los que los implantes miden varios centímetros. Escaneamos los maxilares de gente que no tiene nada de hueso y hay que usar el malar como zona de anclaje del implante. En este caso se permite hacer la cirugía en los modelos que se crean y entonces se reducen casi por completo las posibilidades de error.

-Apenas quedarán casos que no puedan ponerse implantes...

-Ningún caso, la base de todo debe ser la planificación de la operación: tenemos pruebas de imagen para ensayar bien. Cuando tenemos dudas se pueden crear modelos en tres dimensiones a la imagen de los esqueletos de los pacientes para controlar dónde se van a anclar los implantes. Esto da una sensación de seguridad muy grande. Cuando llegan las prótesis no hay posibilidad de error. Así se puede poner implantes a personas que estaban condenadas a no comer casi.