La Cooperativa O Val sobrepasa las 20.000 plantas de pemento do Couto

ana f. cuba NARÓN / LA VOZ

FERROL

CESAR TOIMIL

El presidente subraya la calidad, «inmellorable», de la producción de este año

27 mar 2019 . Actualizado a las 05:00 h.

Sobre las mesas del invernadero de Sinde, muy cerca del edificio principal de la Cooperativa O Val, en Narón, crecen más de 20.000 plantas de pemento do Couto. El presidente de la sociedad, José Díaz Dopico, subraya la calidad, «inmellorable», de la producción de este año, que atribuye al tiempo, un factor «moi importante», y a la experiencia y el mimo en el cuidado de las plantas: «É un produto moi delicado e non te podes pasar nin quedar curto en nada, nin nos tratamentos se hai un problema, nin na fertilización, nin no rego...».

Reconoce, en cualquier caso, que «a planta é mellor uns anos ca outros, e este é moi boa, das mellores que recordamos». La cooperativa explota el único vivero autorizado de plantas de pemento do Couto, reconocido desde 2009 con el distintivo Indicación Xeográfica Protexida (IXP). De aquí salen las plantas que los horticultores cultivarán en sus invernaderos. Juan Fraga, productor de la parroquia de O Val, ya ha comprado la mitad del lote previsto para esta temporada.

«Como fixo moi bo tempo en febreiro e marzo, medrou moito. Xa hai unha semana que plantei a metade, aproveitei que estamos quitando leituga e vai no seu sitio», cuenta Fraga. Las condiciones meteorológicas, adversas para el cereal y otros cultivos en el exterior, resultan muy favorables para el pimiento que se cosecha en invernadero. «O pemento o que quere é calor. O único que hai que facer é regar máis, sobre todo con este vento de nordeste, que seca moito, pero para a planta é o mellor», explica. De hecho, el año pasado, con una primavera muy lluviosa, la cosecha de pemento do Couto se retrasó hasta finales de junio, casi un mes de demora sobre el ciclo habitual.

Potenciar el tomate negro

La Cooperativa O Val quiere potenciar el pemento do Couto, «o produto estrela», y el tomate negro. La sociedad se encarga de comercializar buena parte del pemento que se produce en la zona, a través de sus tiendas y de otras superficies (hay horticultores que canalizan su producción por otras vías). En cuanto al tomate, «gusta moito, pero dá moito traballo, e hai que intentar impulsalo», señala Díaz Dopico.

«É exquisito, pero moi delicado -abunda Fraga-, hai moitos restaurantes que o queren, e tamén particulares, pero ten que haber un canal de distribución grande que permita vendelo rápido, porque aguanta moi pouco tempo desde que se recolle». El tomate negro también cuenta con el reconocimiento de la IXP.

«O pemento quere calor; o único problema é que, con este nordeste, hai que regar máis»