El portador de pieles de zorro en un furgón podría ser sancionado por un fraude fiscal

FERROL

miguel souto

La comercialización de estos subproductos tiene que ser declarada a Hacienda

23 feb 2019 . Actualizado a las 10:34 h.

El descubrimiento, por parte de la Guardia Civil, de 87 pieles de zorro en una furgoneta que circulaba por la carretera de As Pías, en Ferrol, podría derivar en una sanción administrativa por fraude a la Hacienda pública al responsable de dicho transporte. La comercialización de estos subproductos animales está regulada y el portador de la mercancía intervenida por los agentes no aportó documentación alguna que indicase la procedencia, la compra y el destino de la misma.

Existe la sospecha de que las pieles halladas en el interior de la furgoneta puedan proceder de cazadores furtivos que se estén lucrando a través de un procedimiento ilegal. Y es que, si bien la caza del zorro no está prohibida, los que participen de dicha actividad y quieran comercializar las pieles están obligados a declarar las ventas a Hacienda, aportando las correspondientes facturas.

Según la información recogida por este periódico entre cazadores de la zona, la temporada del zorro se cerró la primera semana de febrero en algunos tecores que pidieron una ampliación al período establecido inicialmente, que estuvo comprendido entre la última semana de octubre y la siguiente al día de Reyes. El hecho de que algunas de las pieles descubiertas por la Guardia Civil estuviesen todavía ensangrentadas hace sospechar que esos animales habían sido cazados recientemente o de forma furtiva.

Debido al bajo precio de esos subproductos animales, la mayoría de los cazadores de la zona han renunciado a comercializar las pieles de zorro, que años atrás vendían, de forma legal, a una peletería de Ferrol. De ahí que ahora el destino de las cacerías sean vertederos autorizados, casi siempre a través de propietarios de granjas que disponen de contenedores sandach, que son los destinados a residuos animales y reses muertas. Otro tanto ocurre con piezas de caza que no se destinan al consumo humano.

El conductor interceptado con las pieles en la furgoneta podría ser sancionado, asimismo, por incumplir la normativa establecida para el transporte de estos productos, que debe hacerse en vehículos especiales. Desde la Xunta se señala que la investigación sobre este caso está siendo realizada por la Guardia Civil y que Dirección Xeral do Patrimonio Natural facilitará la información que se le requiera en el curso de la misma.