El aula de naturaleza cumple 20 años enseñando ciencias a los alumnos y a asumir responsabilidades cuidando un huerto del que en verano se ocupan los profesores
05 oct 2018 . Actualizado a las 07:00 h.En el colegio San Xoán de Filgueira estaban ayer de fiesta con la visita de Sonia Fernández, la responsable de la oficina de La Caixa de la carretera de Castilla y la encargada de llevar al centro una noticia: la fundación que posee su banco concede a este complejo 5.000 euros para sus proyectos. Esta ayuda es la respuesta de una petición realizada por la dirección para ampliar una de las aulas que más satisfacciones les han dado a los pequeños: la Natura y que cumple 20 años.
Durante dos décadas los alumnos del centro han creado un huerto que cada vez es más fértil en frutos y en experiencias positivas: «Este ano tivemos tomates e pimentos en gran abundancia -contaba Marián López, la directora.- Todas as colleitas se consumen no cole, nos bocatas do mediodía, por exemplo».
En las últimas temporadas han incorporado dos invernaderos que permitían a los niños trabajar incluso en los días más fríos. «Fai tempo que queríamos incorporar outros dous máis, así que esta axuda permitiranos facelo», explicaba una directora que ayer también recibió un gran paquete de botas de goma que pondrá a los alumnos para que puedan salir a cultivar o a cuidar las tres gallinas incluso en las jornadas más lluviosas.
Hay tareas para todos los cursos y se realizan durante el recreo. Los más pequeños no participan de todas, pero los mayores incluso asumen responsabilidades importantes, algo que les enseña mucho más cómo funciona la naturaleza: «Esta experiencia é especialmente boa para os rapaces que son máis inquietos ou que tardan en concentrarse, porque lles permite aprender a ser máis responsables e reforza moito a súa autoestima», explicaba una profesora que ya ha calculado que la ayuda de la Caixa les permitirá comprar dos invernaderos más (rondan los 1.200 euros cada uno) e incluso hacerse con varias tabletas para que los niños practiquen con programas matemáticos especiales para los estudiantes a los que les cuestan más los cálculos.
Tres gallinas
El aula de la naturaleza del San Xoán de Filgueira se mantiene año tras año gracias a la labor de los profesores del centro que en verano hacen turnos para cuidar las plantas y que sigan siendo productivas cuando regresan los niños en septiembre. Además, las tres gallinas que viven en este huerto educativo -y que son como mascotas para muchos niños- se van a pasar las vacaciones a una finca que tiene la jefa de estudios y hasta muchos docentes se ponen ante los fogones parar preparar mermeladas con las manzanas y otros frutos que da este vergel. «Estas mermeladas tamén se poñen en pan para que merenden os rapaces», cuenta Marián López, que también prepara un magosto con las castañas que los pequeños recogen en los recreos y depositan después en unas cajas dispuestas para ello en el colegio.
El huerto del San Xoán enseña más que ciencias naturales, como reconocía ayer la responsables de La Caixa, más acostumbrados a firmar fríos convenios: «Me encantó el proyecto del colegio, la implicación de los profesores y todo lo que se aprende».
¿Qué se aprende?
Ciencias. En función de su edad los pequeños tienen tareas en el huerto que completan cada recreo.
Conducta. Esta actividad permite que los pequeños más inquietos aprendan a asumir responsabilidades, entre otros valores.