Ricardo López decidió adelantar su posición y el vigués asegura que no es un tarea nueva para él, que se encuentra cómodo de extremo izquierdo
10 ene 2018 . Actualizado a las 05:00 h.Una de las variaciones introducidas en el Racing por el nuevo técnico, Ricardo López, ha sido la de adelantar a Diego Maceira. Desde que llegó al equipo ferrolano jugó de lateral, aunque en Coruxo fue el extremo izquierdo. El vigués tiene talento ofensivo, una buena técnica y disparo. En O Vao hizo un gran partido, no solo metió uno de los goles, sino que trabajó a destajo en esa presión arriba que quiere realizar el preparador. Ricardo López acertó. Maceira demostró que puede jugar perfectamente en esta nueva posición y echar una mano.
El jugador asegura que se encuentra bien de extremo: «Ricardo optó por colocarme en esta posición y la verdad es que yo me encuentro cómodo jugando ahí, más adelantado de lo habitual. Me falta adquirir soltura, aprender automatismos y entenderme mejor con los compañeros de arriba. No es una posición nueva para mí, en las categorías de base siempre jugué ahí, aunque en mi segundo año de sénior me pasaron a lateral izquierdo y ahí me he mantenido hasta ahora. Guardo buenos recuerdos de jugar de extremo y me gusta. Si el míster confía en mí para actuar en esta posición, me parece perfecto. Me da igual jugar atrás o arriba, el caso es sumar minutos y lo más importante es ayudar al equipo, que le hace bastante falta».
En su debut en esta posición, Maceira logró un gol: «Mejor es imposible. Antes de jugar, los compañeros ya me decían que iba a tener suerte y así fue. Salió bien y la que tuve, la metí».
Explica que trató de ayudar en la presión que quiere hacer el técnico: «No es solo una posición de ataque, con el modelo que quiere Ricardo, la gente de arriba tenemos que hacer mucho trabajo para el equipo en la presión. Es una labor dura y que desgasta mucho».
Maceira habló del partido en Coruxo, de los tres goles anotados y de los tres recibidos: «Estamos trabajando duro para conseguir ser más sólidos en defensa. El equipo, por primera vez, hizo tres goles, que también era una asignatura pendiente para nosotros. Ahora, la gran preocupación es ser un poco más fuertes atrás, no nos pueden hacer daño con tanta facilidad. Yo estoy seguro de que vamos en la buena dirección. Con las consignas que da el técnico, estoy seguro de que pronto veremos a un Racing más sólido, más serio y sin conceder tanto al rival».
Un varapalo
Asegura que el varapalo de Coruxo fue duro, sobre todo, por la forma en la que llegó el empate a tres: «Moralmente fue duro. Nos pusimos por delante, ellos nos remontaron el partido, aunque no nos vinimos abajo y le dimos la vuelta a la situación. Duele el empate, no por la forma en la que llegó, sino por el minuto en el que fue. Fue una acción que ellos hacen bien, con una buena peinada de balón. Lo aceptas, aunque que haya sido en el minuto 95 es más duro de asumir. Creo que nos confiamos y en los partidos hasta que pita el árbitro, el encuentro no acaba».
Diego Maceira asegura que los jugadores lo están dado todo, no solo en este encuentro sino desde que comenzó la temporada. «Nosotros llevamos dándolo todo bastante tiempo. Otra cosa es que las cosas no salgan como todos queremos. En el vestuario todo el mundo está implicado al máximo. Ricardo, desde que llegó, trató de darnos aire fresco, inculcarnos confianza, que le hacía falta al grupo. Nosotros agradecemos esta confianza con más trabajo e ilusión. Somos los primeros que queremos superar esta situación y sacar el equipo adelante. Estamos realmente jodidos y ahora lo que queremos es ganar el domingo, llevarnos una alegría en casa y dársela también a la afición».
Subraya que el triunfo tiene que llegar lo antes posible. «Las catorce jornadas sin ganar son una auténtica losa para nosotros. Yo creo que el partido de Coruxo, aunque solo sacáramos un empate, nos va a ayudar. La imagen que dimos fue buena y el trabajo también. Sabemos que si seguimos así, el triunfo tiene que llegar. Ojalá sea en el partido del domingo frente a la Ponferradina en nuestra casa».
Héroe o villano
A la hora de hacerse la gran pregunta. ¿Por qué no funciona el Racing?, Maceira indica que no es fácil de explicar. «Es un cúmulo de cosas, achacarlo a un solo factor es difícil. Si miramos jugador a jugador, en esta plantilla hay mucha gente de calidad, futbolistas con una gran experiencia en Segunda B, Segunda o Primera División. La mayoría ya disputamos muchos play off. Sin embargo, la temporada comenzó torcida, han ido pasando las jornadas y fuimos incapaces de darle la vuelta. La reacción no llega y no queda otra que reconstruirnos con lo que tenemos y apretar los dientes, entre todos, para ir hacia delante. Otra solución no hay. Analizar errores o buscar culpables, ahora no tiene sentido».
Asegura que los muchos palos que reciben, duelen. «Yo he vivido las dos caras en este club. Los dos primeros años fueron formidables y ahora vivo la otra cara del fútbol. La Segunda B es así. Duele. La gente se desilusiona más rápido de lo que se ilusiona. La ley del fútbol es así, no tiene memoria, con los resultados pasas muy rápido de héroe a villano. Hay que aguantar. Nosotros somos conscientes de que no estamos haciendo bien nuestro trabajo y agradecemos los 1.500 que vienen a vernos y a apoyarnos en los partidos. A ellos nos debemos».
Sobre el choque del domingo frente a la Ponferradina dijo. «La salvación pasa por ganar los partidos de casa. Hicimos una primera vuelta pésima en A Malata y la gente se merece ver triunfos y disfrutar con su equipo. La Ponferradina está en una situación delicada, aunque nosotros algo peor. Queremos ganar, por nosotros y por nuestra gente».