Todos los operadores están llamados a sumarse a una nueva asociaciación que se constituirá el lunes
20 sep 2017 . Actualizado a las 05:00 h.«El mercado ahora está abajo y nosotros queremos que vuelva a estar arriba». La frase resume el espíritu con el que nace la nueva Asociación de Vendedores del Mercado de A Magdalena, una entidad impulsada por un grupo de placeros con el objetivo de unir esfuerzos, tener una «sola voz» ante las administraciones y «revitalizar» la actividad comercial en una plaza de abastos que no pasa por su mejor momento.
La iniciativa partió de Gemma González y Amor Pérez, dos operadoras que ya han presentado el proyecto a sus compañeros y que el próximo lunes se volverán a reunir con ellos para celebrar la asamblea constituyente de la nueva asociación. Tendrá lugar a las seis de la tarde, en la sede del Toxos e Froles, y ambas esperan que a la cita acuda el mayor número de vendedores posible. «A la primera reunión vino bastante gente, casi treinta operadores de los noventa que somos en la plaza, y ahora cruzamos los dedos para que vengan más, porque cuantos más seamos más fuerza tendrá la asociación», explica Amor, responsable del Cafetín Amor.
Si no se presenta ninguna otra propuesta, en la asamblea del lunes también se aprobará la junta directiva de la nueva asociación, con Gemma González como presidenta, y Amor Pérez en la vicepresidencia. Las dos encabezan un equipo que pretende resucitar el espíritu asociativo en la plaza -en años pasados funcionó otra agrupación, pero ahora ya hace tiempo que estaba obsoleta e inactiva-, además de poner en marcha medidas para frenar el cierre de puestos y atraer a nuevos clientes.
«Los hábitos han cambiado y los mercados tradicionales no pueden seguir funcionando como lo hacían antes»
«Los hábitos han cambiado y los mercados tradicionales no pueden seguir funcionando como lo hacían antes; tenemos que adaptarnos a los nuevos tiempos», advierte Pérez. En este sentido, a largo plazo la nueva asociación se plantea proyectos ambiciosos como el servicio de reparto a domicilio, la instalación de carritos o la posibilidad de ampliar el horario, aunque son conscientes de que primero habrá que acometer otros retos más «urgentes», como el arreglo de las instalaciones (sobre todo, en lo que se refiere a los accesos), la mejora del mantenimiento o la organización de más actividades para dinamizar las ventas.
Todo esto esperan conseguirlo con ayuda del gobierno municipal, del que aseguran haber recibido muy buen trato hasta el momento. «Hemos tenido varias reuniones con el alcalde y el concejal de Mercados y los dos se han mostrado muy receptivos con nuestras propuestas», dice González.