Los ingenieros navales consideran que Arabia despejará el futuro de Navantia

Beatriz García Couce
Beatriz Couce FERROL

FERROL

La asociación nacional cree que los astilleros públicos pueden ser líderes en Europa

23 feb 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

La Asociación de Ingenieros Navales y Oceánicos de España ha mostrado su apoyo sin fisuras a Navantia en la firma del contrato con Arabia Saudí para la construcción de cinco corbetas para su Armada. La entidad considera que este encargo, junto con el posible pedido de la Marina de Australia para la fabricación de dos buques de aprovisionamiento de combate que está previsto que se resuelva antes de que finalice la primera mitad del año, serviría para despejar el futuro de la compañía pública española.

«Es importante que Navantia consiga una posición fuerte dentro de la construcción naval de defensa, por el bien de nuestra propia seguridad nacional, en un mundo con enormes e impredecibles incertidumbres», destacan desde la asociación.

Los ingenieros inciden en la destacada repercusión que tendrá el encargo con Arabia tanto en cuanto a los años de ocupación que generará como a los puestos de trabajo que sostendrá. «Es un pedido que se calcula que garantizará cinco años de carga de trabajo en el astillero ferrolano y en el de San Fernando (sin conocerse aún en qué porcentaje), y que dará trabajo a unas 2.000 personas, tanto pertenecientes a la plantilla directa como a la industria auxiliar», afirmó.

También subraya la entidad el recorrido en el tiempo que tendrá el contrato, el de mayor importe de exportación material de defensa de los astilleros públicos, ya que incluye el mantenimiento de los buques y la formación y el adiestramiento de las dotaciones.

Además de incidir también en las posibilidades de lograr un nuevo encargo militar en Australia, en donde el Cantabria -modelo con el que compiten los astilleros españoles- estuviese integrado durante casi un año en su flota, la asociación sectorial incide en la importancia del nuevo escenario que se abrirá para la compañía. «Si ambos contratos se confirmasen sería una apuesta segura por el futuro de Navantia, que ya ha empezado a diversificar su producción civil con los contratos con Iberdrola de 29 jackets y una subestación eléctrica, las cinco estructuras Spar para Statoil, los petroleros para Ondimar Transportes y el flotel para Pemex, que conforman una cartera de pedidos hasta, al menos, 2018».

Liderazgo

Además, la organización incide en que, junto con iniciativas como el Astillero 4.0., las obras «podrían llegar a situar a Navantia en una posición de liderazgo dentro de los astilleros europeos».